Jodida blanca navidad de Patty Love

¡Hola a tod@s!

La reseña de la novela que hoy os presento hoy es una colaboración con una autora con la que colaboré

antes y que, al parecer, quedó muy contenta con mi trabajo porque repetimos experiencia. Además, en esta ocasión, repetimos experiencia de una manera bastante adecuada para esta época porque...¡tiene temática navideña!

Sin más tiempo, os dejo con la sinopsis de Jodida Blanca Navidad de Patty Love...

HO, HO, HO! Morry Christmas!

SINOPSIS

♥♥♥LO QUE HA UNIDO LAS VEGAS QUE NO LO SEPARE LA NAVIDAD♥♥♥

Andy Jackson y Rachel Blake tienen algo en común, él la recuerda, ella a él todavía no. Acaban de conocerse, pero no son unos simples perfectos desconocidos. ¿Quién podría haber imaginado que ese fin de semana en Las Vegas iba a cambiarles la vida? Andrea está decidido a enamorar a su mujer, cueste lo que cueste… Rachel está buscando a su marido para divorciarse de él… Pero quizá ha llegado la hora de entregarse a la locura otra vez.

UNA BODA LOCA EN LAS VEGAS.

UNA MUJER QUE NO RECUERDA NADA.
UN HOMBRE CON UN PLAN DE CONQUISTA.

Y LA NAVIDAD A LA VUELTA DE LA ESQUINA…,
EL ESCENARIO PERFECTO PARA QUE SALTE LA CHISPA Y DEJARSE LLEVAR POR LA LOCURA, O QUE TODO ESTALLE POR LOS AIRES.

OPINIÓN

Esta navideña novela a dos voces nos cuenta la historia de amor de Rachel y Andy en una novela a dos voces.

¿Quiénes son ellos? Nada más y nada menos que Rachel Blake, una mujer que forma parte de un proyecto de ingeniería y gestión de stocks para hospitales por reconocimiento facial que se está desarrollando. El proyecto es pionero, pero carece de la financiación necesaria para ponerlo en práctica, de ahí que cuando su empresa descubre que, precisamente hay un congreso en Las Vegas donde habrá inversores, va allí. Y, lo que parecía un viaje de trabajo se convierte en uno de placer - y se complica bastante - cuando, a 19 días de Navidad regresa casada con un tío que no conoce. Y además, con un tatuaje en el culo - nada menos - con la fecha de tan feliz evento y un colibrí. Ese es el único recuerdo que tiene del día. Y bueno, el nombre de su marido: Andy. Pero no el de Andy y Lucas, solo Andy.

Antes de continuar con la reseña he de decir que el tatuaje en el culo me parece una catetada y una cutrez, pero me encanta para esta historia. Porque sí, no es sorprendente el hilo argumental de la obra, pero sí lo que sucederá después. Y una segunda cosa, recuerdo perfectamente que, cuando me hice mi primer tatuaje, el tatuador me prohibió el alcohol 48 horas de ir, así que desconfío de los tatuadores que hacen su trabajo a los bebidos; si bien es cierto que tienen mucho éxito en esas ocasiones.

La voz masculina de la historia es Andy, o mejor dicho, Andrea Jackson de Seattle e ingeniero de sistemas. El chico nuevo en la oficina de Rachel, quien estuvo en coma, pero que sí se acuerda de su mujer. Por eso me da penita. ¿Qué demuestra la aparición de Andy en la oficina? Que no hay trabas para el amor.

Como es lógico, quiere recuperar a su esposa, por muy bizarro que eso suene, pero Rachel, no solo no se acuerda, sino que además quiere el divorcio. Y como para ella, el matrimonio nunca sucedió, continúa con su vida anterior. Eso significa que le sigue dando oportunidades a Gilmore, el sobrino de su jefe, a pesar de lo que le hizo, tanto personal como profesionalmente. Esa es una de las cosas que no me ha gustado de ella. Si yo fuera ella, para quitarme a semejante moscón de encima le hubiera dicho que estaba casada y adiós.

Andy, por el contrario, no quiere divorciarse de ella, sino que cada día se enamora más y más de su mujer. Y es tan evidente que hasta Carol, una chica de la oficina se percata y decide ayudarle. ¡Y de qué manera! Soy muy fan de ella.

Tan buena es Carol haciendo su trabajo que, por fin poco a poco, las cosas se encaminan hacia un final feliz. Y por eso, he de decir que me han encantado sus mensajes - sobre todo los de él - porque Andy no es un texteador de otro nivel, sino que es todo un caballero por no querer aprovecharse de la situación de borrachera para el desfogue, a pesar del dolor de huevos. Eso sí, creo que el precedente anterior entre ambos tiene que ver.

Si bien Rachel no me cae bien en buena parte del libro, tiene una cosa buena: que vive en la ciudad de los Goonies. ¿Puede haber algo más fantástico?

Su luna de miel dura más bien poco. En realidad, comienza con una visita que ambos hacen al mismo sitio sin haberse visto porque el lugar era bastante grande y tiene bastante que ver con el señor despreciable, un inversor interesado en apropiarse de la idea del reconocimiento facial para otros menesteres con una propuesta bastante indecente.

Junto a ello, alguien descubre que Andy no es el bonachón inofensivo que parece ser y que oculta un secreto. Así que, tras ello debe contárselo y con límite de tiempo. Una acción para la que parece no encontrar el momento adecuado - ejem, hubiera sido perfecto tras esa declaración tan emotiva, ¡por Dios! - y por una serie de catastróficas desdichas, Rachel lo descubre todo de la peor manera y en el peor momento posible.

Si bien es cierto con respecto a las mentiras, no me gustó cómo reaccionó. Se lo tomó demasiado a la tremenda, inventándose también una película de acción. Por no hablar de que también le mintió y le ocultó información. Así que no es la más propia para hablar y recriminar cosas.

Por suerte, y para mi salud mental, recapacita.

Al hilo de esto, esperaba un final acorde al principio, pero el del epílogo es cien veces mejor.

Así que si queréis una lectura divertida y bastante acorde para estas fechas, esta novela sin duda es la más propicia para ello.

¡Nos leemos pronto!