El sufrimiento de las cigarras de María Jesús Pérez Navarro

¡Buenas tardes a tod@s!

El post de hoy va dedicado a una autora que fue bastante amable conmigo y me envió un ejemplar de
su  novela en papel. Este no es sino otro ejemplo de lo maravilloso que es Instagram y de lo fantástica que es la comunidad y la relación entre escritores, bookstagrammers y reseñadores en general.

Es de bien nacidos ser agradecidos, y por eso, lo primero que quiero hacer es darle las gracias a María Jesús por el envío del ejemplar. Espero hacerte justicia con la reseña.

Por eso, no pierdo más tiempo y procedo a compartir la sinopsis y mis impresiones sobre El sufrimiento de las cigarras de María Jesús Pérez Navarro.

SINOPSIS

Novela galardonada con el segundo premio en el I Certamen de Novela Casino de Monóvar.

Misterio, amor y sufrimiento en una novela ambientada en La Manga y Cartagena.

1999. Macarena Montiel desaparece de forma repentina. Poco después de los hechos, su marido vende la casa donde pasaron juntos el último verano.

2009. Como cada verano, Celia acaba de llegar a su casa de la playa. Pero todo es diferente ese año, la empresa de su padre se encuentra en una situación crítica, al borde del cierre y cada día Celia vive atormentada por las peleas de sus padres. Lo peor es que Celia no puede evitar sentirse en parte culpable de todo lo que está pasando.

Aunque la calidez de la playa y un nuevo vecino pronto revolucionan el mundo de Celia, le sigue costando sonreír. Hay cosas muy extrañas que empiezan a ocurrir en su propia casa. Cosas que la conducen hasta un misterio desconocido para ella: la antigua propietaria de la casa desapareció al poco de decidir separarse de su marido y el último sitio en el que se la vio con vida fue, precisamente, en aquella casa.

OPINIÓN

Normalmente soy una lectora veloz. Sin embargo, en vista de que este era un libro de intriga, decidí tomármelo con tiempo para ver si, de una vez, conseguía descubrir bien el misterio, bien el asesino. No funcionó. 

Y ese es el único spoiler que voy a hacer del libro porque, debido a su género, cualquier mínima información que pudiera daros, podría ser utilizada en mi contra y ayudaros a entender mejor la historia. No es mi intención. Al contrario, deseo que os sorprendáis tanto como lo hice yo en su momento.

Hay veranos que marcan vidas y eso es precisamente lo que les ocurre a las dos mujeres protagonistas de esta historia; Macarena y Celia. Ellas no se conocerán nunca personalmente, sin embargo comparten un vínculo indisoluble con La Manga en Murcia y ese "pequeño" castillo costero donde habitan en verano.

Pero, el hecho de que no haya un encuentro físico no significa que no haya conocimiento y unión entre ambas, pues será precisamente, la misteriosa desaparición de la primera, lo que lleve a Celia a convertirse en una detective amateur junto a su "amigo" Víctor cuando se cumplen justo diez años de la última vez que alguien la vio con vida.

La historia de por sí ya capta la atención, pero si además, como en el caso de Celia tienes unas circunstancias personales y una convivencia en casa que no es la mejor... sirve como vía de escape y pasar el mejor verano posible.

Las vidas de estas dos mujeres no pueden ser más paralelas pese a la diferencia de edad y tiempo porque ambas también encuentran el amor un verano. Y es ese tipo de amor que se vive como si fuera el primero y que piensas que puede durar toda la vida. A ambas también les llega de modo inesperado y de quien menos se lo espera. Aquí he de decir que he visto algunas críticas hacia lo "voluble" que es Celia con sus sentimientos y estoy en desacuerdo: todas nos hemos sentido atraídas por el "malote" en alguna ocasión como a ella le ocurre con Iván y, Víctor tampoco había hecho avances en ese sentido, así que no vio señales en su dirección.

Pero no solo el amor les une, sino también el canto de las cigarras, las terceras protagonistas de esta novela sin ningún género de dudas. Y, aunque la explicación racional y científica está bien, sin duda prefiero la que la autora le da, esa misma que sirve de título y que tan bien refleja el estado de ánimo de las protagonistas.

Me gustaría felicitar a la autora pro la descripción de los paisajes porque ha sido tan minuciosa y descriptiva que he podido imaginarme sin problemas paseando por Murcia, lugar en el que nunca he estado. Y sobre todo, he podido pisar la playa aunque sea en mi imaginación, cosa que no he podido hacer físicamente a causa de este maldito virus. Eso es algo que he echado de menos terriblemente en el pasado 2020 y por eso, se lo agradezco.

Asimismo, también le agradezco el hecho de que maya mantenido engañada durante toda la narración. Aparte de que envidio terriblemente las habilidades detectivescas de Víctor y Celia, siempre había pensado que en la casa hubo una muerte violenta y que por eso, además de la familia de Celia, había una presencia no corpórea allí. Sobre todo por los episodios del baño y el reloj.

No era así, mas he de concluir que es increíble lo que la mente humana puede conjurar. Incluso da miedo.

Solo hay un aspecto "negativo" aunque no lo llamaría así por completo en esta historia.

Como es lógico, ambas debían unirse por completo en un punto de la novela; es decir, en el clímax y, aunque me alegro de que Macarena tenga en cierto modo su final feliz... lo encontré un poco flojo, sobre todo porque mi mente se había imaginado lo peor para ella.

Ese punto débil sin embargo, pronto queda superado con la gran revelación de Celia. Eso sí que no lo vi venir por ninguna parte, si bien hubo veces en los que actuó de manera extraña y errática durante el verano. Si yo hubiera sido Víctor, no me lo hubiera tomado con tanta "normalidad", mi grado de sorpresa y alucinación con toda la situación hubiera sido bastante más grande.

He de decir también que, aunque me explotó la cabeza, sí que me hubiera gustado que lo desarrollaran un poco más, pues me dio la sensación de que pasaban un poco por encima de ello a causa de que estábamos acercando al final de la historia.

Sin embargo, solo puedo poner pegas a esas dos pequeñas minucias porque la historia está muy bien contada e hilada y todos los personajes, por muy secundarios que sean, tienen su importancia, desarrollo y porqué entre sus páginas.

Recomendadísma lectura.

Por mi parte, estaré muy pendiente a las próximas publicaciones de María Jesús y por supuesto, a partir de ahora, de que escuche cantar a las chicharras - que es así como las llamamos por aquí - pensaré en esta novela. 

¡Nos leemos pronto!

 

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