El Dios Pálido y otros relatos de terror de Nicolás Francis
¡Buenas tardes!
La reseña que os traigo hoy es también una de esas que se ha visto afectada por ese examen de turismo
sacado de la nada. Sin embargo, tras la finalización de mi período de exámenes, he vuelto rauda y veloz para ponerme al día con todo lo que tengo pendiente, puesto que no me gusta dejar las cosas pendientes.
He utilizado este párrafo de disculpa como introducción y explicación para la novela que reseñaré en este post, puesto que ha sido una colaboración con el autor, Nicolás Francis.
Os dejo la sinopsis de El Dios Pálido y otros relatos de terror aquí mismo antes de mi opinión al respecto:
SINOPSIS
El Dios Pálido y otros relatos de terror es una antología de siete historias que van desde el horror y la ciencia ficción, hasta el suspense y el misterio sobrenatural. Asesinos seriales, muertos vivientes, dioses antiguos, dimensiones paralelas y mucho más...
André es un escalador que no le teme a nada. Luego de conquistar todas las cumbres, llega hasta sus oídos un nuevo desafío: una misteriosa montaña ubicada en una recóndita zona de Nepal, conocida como El Dios Pálido.
Los aldeanos le advierten que jamás regresan los que suben a la montaña. Se dice que allí vagan almas perdidas, sin tiempo ni espacio, ansiosas por contar sus historias a los viajeros y mostrarles el verdadero terror…
¿Te animas a subir?
OPINIÓN
Como sabéis por otras reseñas que he hecho previamente de antologías y relatos compilados, en lugar de hacer una reseña al uso, lo que haré será describir y lo que me provocó la lectura de cada una de las historias de este libro.
He de decir que, antes de leer la sinopsis me imaginé que el dios pálido sería una persona de piel blanca que destacaba precisamente por su color de piel. Al estilo de la llegada de los españoles a América, quienes fueron confundidos por una divinidad específica de su panteón.
En la introducción conocemos que el protagonista y el hilo conductor de esta antología es André, un hombre de 27 años que es escalador y que viaja a Nepal para escalar una montaña llamada el Dios Pálido, la cual mide 8.000 metros y a la que sus guía nepaleses consideran tierra sagrada.
Una vez en la cima descubre varias cosas: hay un ermitaño que habita allí, está a mitad de camino y que él sabe cómo llegar. He de decir que en esta introducción André me pareció un pelín prepotente, de ahí que me guste que la montaña tenga vida y personalidad propias y por eso, no le ayudará con tanta facilidad.
- Partes corporales: El primer relato tiene a Julia Parker protagonista, y, si bien no me equivoco, es un homenaje a Frankenstein. En este relato hay de todo: asesinatos, zombies, persecuciones, Cannock Chase, un lugar maldito... vamos, bastante completito. Me gustó mucho porque es un círculo perfecto y para nada esperé la evolución de Julia, sobre todo al compararla con lo que se describía al inicio.
- El álbum: En este relato los protagonistas son dos hombres, abuelo y nieto. El anciano sufre de cáncer y no quiere continuar con su medicación. El nieto se llama Martín y le hace compañía en sus últimos días. Para pasar el tiempo, deciden observar un antiguo álbum de las conquistas del anciano, quien además era aficionado a la fotografía. Este relato es sorprendente, me dejó con la boca abierta su final ya que para nada imaginé la deriva que tomó. Brutal. De mis favoritos de la antología.
- Helheim: Antes de leer este relato, he de confesar que vi mucha similitud a la palabra Hell, es decir, infierno en inglés. Atraída por esto, busqué en Google por si tuviera algún significado específico y así descubrí que era el reino de la muerte en la literatura nórdica.
Este relato sucede en la Segunda Guerra Mundial y tiene como protagonistas a un grupo de soldados. De nuevo me vi sorprendida cuando descubrí el lugar exacto donde sucedía -que no era la Antártida- Además de que los asesinos han de ser castigados, tiene una lectura positiva y esa es que el grupo estaba bastante cohesionado.
- Ella: Este es uno de los relatos que menos me ha gustado. Si bien me ha sorprendido descubrir quién o mejor dicho qué era ella, no lo he visto tan potente como aquellos que le preceden. Tiene como protagonista a Dean, quien trabaja como consultor en una empresa que debe dinero. Trabaja desde casa y, desde allí llegado a un cierto punto, comienza a escuchar gemidos de orgasmos. Va a quejarse y descubre que son dos ancianos. Regresa la hija del matrimonio -quien es su vecina originalmente- y... ahí se precipita todo y se revela el secreto de ella.
- Una limpieza especial: Este relato tampoco se sitúa entre mis preferidos. En este caso porque me ha dejado con la intriga de saber el motivo por el cual la mujer de Steve, el protagonista de la misma, para que esté tan enfadada. Este Steve trabaja como limpiador y asegura hacer una limpieza profunda de la casa a la que llaman. Lo cierto es que no dicen ninguna mentira porque... ¡menuda limpieza la que ejecuta!
- El hombre en el espejo: Este penúltimo relato sin embargo, sí que me gustó algo más. He de decir que uno de los motivos de esa reconquista se debe a que el protagonista es profesor de historia como yo. El segundo motivo por el cual también me gustó se debe a que recupera la atmósfera de terror de las novelas victorianas... las cuales me encantan.
Como he mencionado, el protagonista es viudo y tiene un hijo ciego llamado Eric. Será él el motivo por el cual realice un enorme sacrificio de amor. Si bien no se puede objetar nada a la relación padre e hijo, mi personaje favorito sin duda es Didier Delacroix, me lo imaginé muy del estilo del personaje malo de Tiana y el sapo, el Doctor Facilier.
Debo mencionar también que aquí también recurre al recurso del círculo perfecto cerrado para narrar el arco argumental de la historia y que el final es sorprendente. Asimismo, el sacrificio por amor vuelve a ser tratado.
- El Dios pálido, de nuevo: Como ya he mencionado antes, el libro concluye tal y como termina, repitiendo el recurso del círculo. Por eso, volvemos a la historia de André. Un André a quien, al igual que al lector, le han dado pistas sobre qué ha de hacer para conseguir su objetivo. Y es en este punto final cuando uno se pregunta hasta dónde estaría dispuesto por alcanzar la fama, porque toda acción de gloria requiere un sacrificio. Hay lectores que consideran que no tiene un final feliz, aunque yo creo que sí.
En resumen, como en todo libro de relatos, hay algunos que me han gustado más y otros que me han gustado menos. Una cosa es coincidente en todos, eso sí. Y esa es la capacidad de sorprenderme de manos de la pluma del autor, a quien felicito y agradezco el envío del ejemplar en digital. En este caso las gracias son dobles porque hacía tiempo que no me adentraba en el género del terror y me ha ayudado a darme cuenta de que lo extrañaba.
¡Nos leemos pronto!
La reseña que os traigo hoy es también una de esas que se ha visto afectada por ese examen de turismo
He utilizado este párrafo de disculpa como introducción y explicación para la novela que reseñaré en este post, puesto que ha sido una colaboración con el autor, Nicolás Francis.
Os dejo la sinopsis de El Dios Pálido y otros relatos de terror aquí mismo antes de mi opinión al respecto:
SINOPSIS
El Dios Pálido y otros relatos de terror es una antología de siete historias que van desde el horror y la ciencia ficción, hasta el suspense y el misterio sobrenatural. Asesinos seriales, muertos vivientes, dioses antiguos, dimensiones paralelas y mucho más...
André es un escalador que no le teme a nada. Luego de conquistar todas las cumbres, llega hasta sus oídos un nuevo desafío: una misteriosa montaña ubicada en una recóndita zona de Nepal, conocida como El Dios Pálido.
Los aldeanos le advierten que jamás regresan los que suben a la montaña. Se dice que allí vagan almas perdidas, sin tiempo ni espacio, ansiosas por contar sus historias a los viajeros y mostrarles el verdadero terror…
¿Te animas a subir?
OPINIÓN
Como sabéis por otras reseñas que he hecho previamente de antologías y relatos compilados, en lugar de hacer una reseña al uso, lo que haré será describir y lo que me provocó la lectura de cada una de las historias de este libro.
He de decir que, antes de leer la sinopsis me imaginé que el dios pálido sería una persona de piel blanca que destacaba precisamente por su color de piel. Al estilo de la llegada de los españoles a América, quienes fueron confundidos por una divinidad específica de su panteón.
En la introducción conocemos que el protagonista y el hilo conductor de esta antología es André, un hombre de 27 años que es escalador y que viaja a Nepal para escalar una montaña llamada el Dios Pálido, la cual mide 8.000 metros y a la que sus guía nepaleses consideran tierra sagrada.
Una vez en la cima descubre varias cosas: hay un ermitaño que habita allí, está a mitad de camino y que él sabe cómo llegar. He de decir que en esta introducción André me pareció un pelín prepotente, de ahí que me guste que la montaña tenga vida y personalidad propias y por eso, no le ayudará con tanta facilidad.
- Partes corporales: El primer relato tiene a Julia Parker protagonista, y, si bien no me equivoco, es un homenaje a Frankenstein. En este relato hay de todo: asesinatos, zombies, persecuciones, Cannock Chase, un lugar maldito... vamos, bastante completito. Me gustó mucho porque es un círculo perfecto y para nada esperé la evolución de Julia, sobre todo al compararla con lo que se describía al inicio.
- El álbum: En este relato los protagonistas son dos hombres, abuelo y nieto. El anciano sufre de cáncer y no quiere continuar con su medicación. El nieto se llama Martín y le hace compañía en sus últimos días. Para pasar el tiempo, deciden observar un antiguo álbum de las conquistas del anciano, quien además era aficionado a la fotografía. Este relato es sorprendente, me dejó con la boca abierta su final ya que para nada imaginé la deriva que tomó. Brutal. De mis favoritos de la antología.
- Helheim: Antes de leer este relato, he de confesar que vi mucha similitud a la palabra Hell, es decir, infierno en inglés. Atraída por esto, busqué en Google por si tuviera algún significado específico y así descubrí que era el reino de la muerte en la literatura nórdica.
Este relato sucede en la Segunda Guerra Mundial y tiene como protagonistas a un grupo de soldados. De nuevo me vi sorprendida cuando descubrí el lugar exacto donde sucedía -que no era la Antártida- Además de que los asesinos han de ser castigados, tiene una lectura positiva y esa es que el grupo estaba bastante cohesionado.
- Ella: Este es uno de los relatos que menos me ha gustado. Si bien me ha sorprendido descubrir quién o mejor dicho qué era ella, no lo he visto tan potente como aquellos que le preceden. Tiene como protagonista a Dean, quien trabaja como consultor en una empresa que debe dinero. Trabaja desde casa y, desde allí llegado a un cierto punto, comienza a escuchar gemidos de orgasmos. Va a quejarse y descubre que son dos ancianos. Regresa la hija del matrimonio -quien es su vecina originalmente- y... ahí se precipita todo y se revela el secreto de ella.
- Una limpieza especial: Este relato tampoco se sitúa entre mis preferidos. En este caso porque me ha dejado con la intriga de saber el motivo por el cual la mujer de Steve, el protagonista de la misma, para que esté tan enfadada. Este Steve trabaja como limpiador y asegura hacer una limpieza profunda de la casa a la que llaman. Lo cierto es que no dicen ninguna mentira porque... ¡menuda limpieza la que ejecuta!
- El hombre en el espejo: Este penúltimo relato sin embargo, sí que me gustó algo más. He de decir que uno de los motivos de esa reconquista se debe a que el protagonista es profesor de historia como yo. El segundo motivo por el cual también me gustó se debe a que recupera la atmósfera de terror de las novelas victorianas... las cuales me encantan.
Como he mencionado, el protagonista es viudo y tiene un hijo ciego llamado Eric. Será él el motivo por el cual realice un enorme sacrificio de amor. Si bien no se puede objetar nada a la relación padre e hijo, mi personaje favorito sin duda es Didier Delacroix, me lo imaginé muy del estilo del personaje malo de Tiana y el sapo, el Doctor Facilier.
Debo mencionar también que aquí también recurre al recurso del círculo perfecto cerrado para narrar el arco argumental de la historia y que el final es sorprendente. Asimismo, el sacrificio por amor vuelve a ser tratado.
- El Dios pálido, de nuevo: Como ya he mencionado antes, el libro concluye tal y como termina, repitiendo el recurso del círculo. Por eso, volvemos a la historia de André. Un André a quien, al igual que al lector, le han dado pistas sobre qué ha de hacer para conseguir su objetivo. Y es en este punto final cuando uno se pregunta hasta dónde estaría dispuesto por alcanzar la fama, porque toda acción de gloria requiere un sacrificio. Hay lectores que consideran que no tiene un final feliz, aunque yo creo que sí.
En resumen, como en todo libro de relatos, hay algunos que me han gustado más y otros que me han gustado menos. Una cosa es coincidente en todos, eso sí. Y esa es la capacidad de sorprenderme de manos de la pluma del autor, a quien felicito y agradezco el envío del ejemplar en digital. En este caso las gracias son dobles porque hacía tiempo que no me adentraba en el género del terror y me ha ayudado a darme cuenta de que lo extrañaba.
¡Nos leemos pronto!
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