Hielo seco de Jorge Sánchez López

¡Buenas tardes!

La reseña del libro del que os hablo hoy se trata de una colaboración en digital con su autor. Pero no, 

esta vez no se trata de una novela que se presenta al Premio Literario de Amazon. De lo que sí se trata es de la lectura de una nueva obra de un autor del que ya conocía su pluma y cuya reseña está en el blog.
Sin embargo, se trata de una novela diferente a la anterior, puesto que en el primer caso la novela era un conjunto de relatos breves y ahora es una novela negra corta.
Sin embargo, como no quiero entretenerme mucho más en la introducción y sí más en la reseña, procedo a dejaros con la sinopsis y después mi opinión al respecto de Hielo Seco de Jorge Sánchez López:


SINOPSIS

En un complejo vacacional e inmobiliario de Oropesa del Mar, en la costa levantina, el inspector Almanzor recibe la orden de investigar la muerte de Malory, una inquilina irlandesa que se encontraba en una bañera de hidromasaje privada con Brendan, su marido. Aun sin rechazar la hipótesis de un suicidio debido a la falta de huellas, el equipo policial se dedica a un caso en el que la única pista es la presencia en el agua de hielo seco o nieve carbónica, un compuesto que normalmente resulta inocuo, pero que en una concentración elevada puede provocar una muerte inquietantemente dulce.
La trepidante trama lleva a Almanzor, un agudo policía y psicólogo criminalista, Roberto, el oficial que lo acompaña, Rosa, la especialista forense, e Isabel, la comisaria que dirige el proceso, a incidir en las relaciones personales de la pareja, en el negocio urbanístico de Gerard, el dueño de la inmobiliaria, sí como en el crimen organizado que aflora en la zona.

A través de un narrador en tercera persona que se focaliza alternativamente en diferentes personajes, el lector accede a la visión personal y los recuerdos de la familia y los amigos de la víctima. Brendan realiza un estudio del delito paralelo; Adriana, amiga y compañera de trabajo de Malory en una escuela infantil, presenta problemas psiquiátricos a causa del trauma generado al presenciar la escena del posible crimen; Eileen, hermana de la fallecida, Sinead, sobrina de la misma y exnovia del socorrista Alex, nos revelan detalles de su vida íntima; Anthony y Daniela, vecinos de la zona, se convierten en figuras clave para reconstruir la vida de la mujer en un escenario donde nada es lo que parece.

OPINIÓN

Antes de comenzar con la reseña propiamente dicha, he de decir que que la portada me recuerda muchísimo a las que solían copar este tipo de novelas en los años 90.

Dicho esto, es difícil escribir una reseña propiamente dicha de la obra puesto que el resumen prácticamente toca todos los puntos de la obra. Sí que he de decir sin embargo que me sorprendió muy y mucho qué era el hielo seco porque desconocía por completo los riesgos de un baño en una piscina -o un jacuzzi en este caso - cuando no se equilibra. Claro que, como todo en la vida, el equilibrio es la clave para todo.

Además y al hilo de esto, he pasado de no saber nada, a tener una especie de epifanía porque, desgraciadamente, esta ha sido precisamente -no el asesinato, el hielo seco- de la muerte de un trabajador de una piscina.

Si vosotros no sabéis qué es el hielo seco, lo lamento pero no voy a desvelaros ya que es uno de los temas más importantes de la misma. No es tan complicado, podéis buscarlo por Google.

Centrándome en la novela, todos sabéis que mi objetivo cuando leo una novela de este género es intentar identificar quién es el asesino. Y como es habitual en mí, en este caso, tampoco lo he descubierto. En mi defensa he de decir que durante buena parte de la misma he estado dudando muy y mucho de si se había tratado de un accidente o de si realmente había sido asesinada. Ahí está una de las claves de la escritura de Jorge porque, si bien una novela corta, toca todos los puntos necesarios para que que tenga sentido y capte la atención del lector.

Sobre todo porque, nada es lo que parece y todo el mundo - entendiéndose por los personajes principales -es sospechoso. Con la excepción de la muerta, Malory, por supuesto. No en el sentido del asesinato - aunque he de confesar que incluso llegué a pensar que todo era fingido- sino en el de los secretos. Que los tiene. Y muy sorprendentes.

Juan, la pareja de Adriana que tiene un giro sorprendente que no vi venir en la novela.

O Adriana, quien se va de vacaciones a Oropesa del Mar con el matrimonio irlandés. Actitud que no entiendo porque yo jamás me iría de vacaciones con otra pareja y ejercer así de sujetavelas.

Gerard, el dueño del complejo, quien además de sus secretos es el menos interesado en que el lugar reciba una publicidad tan negativa como es el hecho de una muerte. 

Incluso el entorno donde suceden los hechos - la urbanización en Oropesa - oculta secretos, así que os prevengo dándoos el consejo de que mantengáis los ojos tan abiertos como el inspector encargado del caso, Almanzor. Un hombre que al principio no ejerce como policía/comisario/inspector encargado del caso - lo cual es novedoso- sino que es profesor de Criminología. Del mismo modo que también es inusual que no tuviera un enorme interés en hacerse cargo del mismo. Sin embargo, a medida que va descubriendo las interrelaciones de todos los personajes y que todos son más de lo que parece a simple vista... no le queda de otra que dedicarse por entero a su resolución.

¿Lo logra? ¿Reconstruye los hechos y conoce las motivaciones?

No puedo decirlo porque sería contaros un gran spoiler, pero sí que os puedo recomendar su lectura, no solo por la historia que narra sino porque es una historia cortita de poco más de cien páginas.

Quiero dar las gracias a Jorge, su autor por el envío del ejemplar en digital.

¡Nos leemos muy pronto!