Las Doncellas de Alex Michaelides

¡Buenas tardes!

Tras el parón de un fin de semana en el que he estado bastante ocupada, vuelven los lunes de reseñas.

En este caso le toca el turno a una novela cuyo autor leí hace no mucho y, bueno, aunque best-seller y bien narrado, no puedo decir que La paciente silenciosa esté entre mis lecturas favoritas de este año.

Mi experiencia anterior no fue sin embargo, impedimento para darle una nueva oportunidad. Por eso, cuando vi que sacaba una nueva novela, y sobre todo, cuando vi su portada, me decidí a leerla.

Por eso, sin más dilación, termino aquí y ahora la introducción y os dejo con la sinopsis y mi opinión de Las Doncellas de Alex Michaelides:

SINOPSIS

A sus treinta y seis años, Mariana intenta recuperarse de la pérdida de Sebastian, el gran amor de su vida, ahogado durante unas vacaciones en una isla griega. Ella trabaja en Londres como terapeuta, pero cuando su sobrina Zoe, la única familia que le queda, la llama desde Cambridge para contarle que Tara, su mejor amiga, ha sido brutalmente asesinada cerca de la residencia de estudiantes, decide acudir en su ayuda.

Allí conoce a Fosca, un carismático profesor de Filología Clásica. El profesor mantiene un grupo de estudio con un número muy selecto de discípulas, todas hermosas y de familias elitistas, del que Tara formaba parte: las Doncellas. En el dormitorio de la joven, Mariana encuentra una postal con unos versos en griego clásico que exigen un sacrificio. Pronto los cadáveres de otras Doncellas irán apareciendo en el campus con los ojos arrancados y con una piña en la mano, y Mariana no solo deberá enfrentarse a la resolución de estos crímenes, sino a los fantasmas de su propio pasado.

OPINIÓN

Efectivamente, se trata de una novela negra en la que había que descubrir quién era el asesino. Y, como podréis imaginar, tampoco descubrí la identidad del asesino. Sí que tuve claras dos cosas sin embargo: la primera, que el asesino no iba a ser el profesor puesto que era demasiado obvio y segundo, que iba a ser una mujer.

¿Por qué? Porque repite patrones con la novela anterior.

El primero de ellos es el de la importancia y protagonismo que le da a las mujeres en esta novela, ya que tanto la protagonista como su sobrina son de género femenino y, por si esto no fuera suficiente, el misterio gira en torno a las Doncellas, otro grupo de mujeres de lo más particular.

El segundo motivo precisamente tiene que ver con estas chicas, a quienes al principio me imaginé como una especie de vírgenes vestales contemporáneas, pero que al final estaban más relacionadas con las mujeres elegidas para formar parte del culto mistérico dedicado a Deméter en Eleusis. Porque, como decía, de nuevo la mitología sirve de base para trazar toda la subtrama de asesinatos de esta novela.

Destaco también como algo muy positivo el hecho de que se desarrolle en Cambridge, una ciudad que pude visitar en mi estancia en Inglaterra -de hecho, fue la primera excursión que hice al llegar allí y con eso me gané el amor y respeto de mi host dad para los restos- y con la lectura volví a recorrer sus calles.

El tercero es que no se complica la vida. Es decir, se toma a sí mismo - es decir, a lo que él ha estudiado- como punto de referencia en la profesión de Mariana. Detalle que está muy bien porque explica con todo lujo de detalles sin resultar pedante algunos trastornos y términos psicológicos para seguir sin sobresaltos la novela.

El cuarto es la utilización de un diario con el que te cuenta una historia paralela a la principal. Justo como en su novela precedente, de la que he de decir que me encantó el guiñó a esta.

Nadie es lo que parece en esta novela, la cual nos recuerda que la perfección no existe y que, cualquier idea imaginada sobre la misma es una ilusión fantástica. De ahí que, cuando la realidad golpea tan duramente, se cae el castillo de naipes que se había construido. Eso es precisamente lo que le sucede a Mariana, la protagonista dos veces. No hay más ciego que quien no quiere ver, solo puedo decir eso. Y no importa si eres terapeuta de grupos, será precisamente un grupo quien la traiga de cabeza. Le pasa cuando se queda viuda de Sebastian, su primer amor y la persona en la que, en torno a él había construido su vida sin darse cuenta. Y le volverá a pasar en la gran revelación.

Quiero destacar también a las figuras masculinas de esta novela.

Del profesor Fosca he de decir que lo he visualizado por completo y que, he de confesar, yo también he sucumbido a su encanto. Porque eso es lo que es, un encantador de serpientes.

Y también me pasó con Fred, el friki informático tímido que se enamora fulminantemente de Mariana, dándole una esperanza de renacimiento como a la naturaleza en el mito de Deméter y Perséfone y Henry, su paciente más peligroso, por su obsesión malsana con ella.

Volviendo a la mitología y la cultura griega, si bien la modificación del carácter de Perséfone no me ha entusiasmado -no era tan vengativa como la pintan aquí- lo he entendido como recurso literario necesario. Y tomar como referencias las diferentes tragedias griegas -texto incluido - o mujeres importantes -reales y/o mitificadas de la Antigüedad- para las muertes rituales... espectacular.

En resumen, esta novela me ha gustado más que la segunda, pero como he dicho, no está situada entre mis mejores lecturas del año. No faltarán sorpresas, eso sí, así que la recomiendo para los amantes del género y sobre todo, si sois amantes del autor, puesto que se aprecia un desarrollo y madurez en su pluma al compararlo con la novela anterior.

¡Nos leemos pronto!