Adam de María R. Box

¡Buenas tardes!

La -segunda- entrada y post del blog de hoy están dedicadas a otra colaboración en digital. En esta
ocasión se trata además de un libro que podría decirse casi recién sacado del horno pues no hace mucho tiempo, la Colección Mil Amores lo publicó en formato tanto en digital como en papel.

Sin embargo, yo tuve la ocasión de poder leerlo gracias a que la autora de la misma, María, publicó unas historias en su perfil de Instagram en las que preguntaba por lecturas para su novela. Como sabéis, siempre estoy en búsqueda de nuevas plumas y, como su libro Florencia, el primero de la serie Destinos, había llamado la atención tiempo atrás... decidí apuntarme.

Explicadas las condiciones para la colaboración y aceptadas, me dispuse presta y dispuesta con su lectura y... me duró un suspiro. Pero, como eso debe ser explicado en otra parte del post, no me entretengo más en la introducción y explicación de cómo este libro llegó a mis manos y os dejo con la sinopsis y mi opinión de Adam de María R. Box.

SINOPSIS


Un libro sincero, emotivo y alejado del tópico: el amor más perfecto... entre dos seres imperfectos.

Adam era de todo menos perfecto. Su adicción al alcohol, a las drogas y su capacidad para meterse en problemas eran un secreto a voces que a él no podía importarle menos. Había demasiados demonios encerrados en su cabeza, demasiadas voces hirientes y malignas repitiéndole que, para una persona como él, aquello era todo a lo que podía aspirar.
Rachel era muchas cosas, pero una universitaria normal no era una de ellas. Las chicas de su edad no cerraban con llave su habitación, no se sentían como extrañas en su propia casa y no rogaban al cielo por salir por esa puerta y no volver nunca más...
Adam y Rachel no eran, ni de lejos, el modelo de pareja perfecta. Simplemente no pegaban, o eso era lo que ambos creían. Sin embargo, solo ellos fueron capaces de ponerle nombre a lo que habían creado.



OPINIÓN

Antes de comenzar la reseña propiamente dicha, me gustaría detenerme un poco en la portada porque, he de confesar que, en cierto modo me despistó la presencia de esa guitarra. Pensé que sería el modo y vía de escape de Adam, el protagonista de la realidad que estaba viviendo o de un trauma que no era capaz de superar. Me agrada decir que, una parte de mis pensamientos eran acertados, no así la otra. Del mismo modo que me agradó leer que su sueño no era convertirse en una estrella de la música, no por ningún motivo en particular más allá de que he leído muchos libros con esa premisa en el arco argumental de uno de los protagonistas y he acabado un poco saturada.


Por otro lado, como esta portada despertó en mí la vena analítica que a veces desarrollo, fijé también mis ojos en la presencia del diente de león en ella. Una flor que es de apariencia frágil, de hecho, basta un "soplido" para romperla, pero, al mismo tiempo, es valiente porque no le teme a su traslado y además, esa ruptura con todo lo anterior provoca que, de nuevo vuelva a crecer fuerte y eche raíces en un nuevo lugar. Y, no hay mejor cadena de metáforas para definir a Rachel, la protagonista masculina de la historia.


Entrando ya en materia, esta no es la típica historia de chico malo conoce a chica tímida con cierto misterio, se enamoran y ella provoca que cambie de manera radical con su vida anterior.
Si que es cierto que Adam es una perlita considerable: consume alcohol, las drogas, usa en cierto modo a las mujeres, su relación tanto con su padre como son su hermano no es la hermano y tiene una fama no demasiado buena en la universidad -aunque esa es precisamente la que le otorga su tremenda popularidad.
Y también que Rachel es muy tímida y prefiere pasar desapercibida dentro de las multitudes, una característica que es bastante difícil de conseguir cuando eres nueva en la ciudad, puesto que se ha trasladado desde Londres a Birmingham. Añadiría también que el rottwailer que siempre le acompaña no solo le da la sensación de seguridad que tanto necesita en su vida, sino que también representa el grado de confianza que tiene con el género humano.

Ambos son todo eso. Y mucho más. De hecho, a través de ellos, la autora lanza el primer gran mensaje importante de la historia: todos somos más de lo que mostramos a los demás, con lo cual la empatía hacia los demás debería ponerse más en práctica porque quizás hay una explicación bastante razonable para el modo en el que actúen. Incluso diría que en muchos de esos casos, ese carácter fuera de la norma es su forma de llamar la atención y pedir ayuda porque no saben -o les da vergüenza- hacerlo de otro modo.

Es una historia donde experimenté sentimientos muy diversos.
Así, me hizo gracia en modo enternecedor que los amigos intentaran juntarles de todas las maneras posibles y sobre todo, lo más divertido fue leer como fracasaban en todas sus intentonas.
Al hilo de esto, también fue gracioso el que ellos se negaran en negar lo evidente y en catalogarse el uno al otro como solo amigos cuando era evidente que siempre fueron algo más. Pero, en cuestión de relaciones, ambas partes han de estar de acuerdo a la hora de iniciarla y ese es el segundo mensaje importante doble que la autora nos deja entre sus páginas.

También sentí mucha curiosidad. Por Rachel, sobre todo ya que estaba convencida de que ocultaba algo. Lo que no me imaginaba de ninguna de las maneras es lo que ella vivía cotidianamente. Creo que es la primera vez que leo algo similar y... se me encogió el corazón. Si me cayó bien por aquello de la simpatía a primera lectura porque las tímidas nos apoyemos entre nosotras, la quise aún más por la enorme fuerza que tiene en su soledad. De ahí que me alegrase tanto que encontrara a alguien como Adam.

Relacionado con este tema, el tercer gran tema que se trata es el de la paternidad. Porque padre no nace, sino que se hace. Y en este caso, la gran mayoría de progenitores suspenden en el ejercicio de sus funciones. Hay mucha falta de amor intergeneracional y, hubo determinados comportamientos y acciones por parte de ellos que me enfadaron.

Como en toda historia que se precie, también hay lugar para los antagonistas. Un rol que en este caso le corresponde a Brandon, el segundo gallo del corral universitario, quien está un poco obsesionado con su rival. Y de nuevo, gracias a este personaje, la autora nos advierte de los peligros de una obsesión malsana no tratada a tiempo. Aunque, no hay peor enemigo que uno mismo y, en este caso, los protagonistas son los héroes y villanos de su propia historia. De ahí que de nuevo recalque el tema de la empatía. Y de la necesidad de los psicólogos. En esta historia en particular más de uno es necesario.

Por último, he empezado diciendo el post que esta es una historia de amor. Y lo es, preciosa. Pero no hay que desdeñar o relativizar a las otras historias presentes en ella, de entre las que destacaré la presencia de una relación poliamorosa. Sobre todo porque es la primera vez que he leído acerca de una en una novela. Personalmente, creo que sería incapaz de ser parte de una. Sin embargo, entiendo la inclusión en el argumento de esta historia y destaco por encima de todo el beneficio para la evolución tan enorme que tiene una de las secundarias de la historia.
Con respecto a este tema, la autora lanza también un mensaje muy poderoso acerca de las relaciones de pareja: hay que establecer siempre los límites a la hora de empezarlas y lo que es aún más importante, al menor menosprecio o síntoma de que hay algo raro... carretera, manta y señalad lo bien abierta que está la puerta

No puedo dejar pasar la oportunidad de mencionar otros temas secundarios ahí incluidos como que hay ocasiones en las que las palabras hieren más que los golpes, que hay ocasiones en que las redes sociales no son negativas y por encima de todo, que la justicia siempre prevalece -aunque hay ocasiones en las que esta tarda en llegar - y que a todo cerdo le llega su San Martín.

Pese a su número de páginas, me lo leí en poco más de un día. Ese es el nivel de enganche y gusto que tuve por esta historia. Narrada de manera ágil y con un montón de temas, os enamoraréis de la historia de amor de Adam y Rachel llena de serendipias y coincidencias y descubriréis por vosotros mismos cómo el amor en su versión sana, cura y mejora a las personas.

Muchas gracias a María y a la editorial de nuevo por dejarme conocer su pluma.
Ha sido un verdadero placer.

¡Nos leemos muy pronto!
 

Comentarios

  1. Muchísimas gracias por la maravillosa reseña que has hecho de Adam 🤩 ha sido todo un placer colaborar contigo. Y me emociona muchísimo que hayas comprendido tan bien la historia porque para mí Adam es muy especial ❣️

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