Veinte motivos para olvidarte del amor de Raquel Antúnez

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedicada a una novela que adquirí en formato pack a la autora, cuya 
pluma conocía de varios libros viajeros suyos en los que he participado.

Fue precisamente ese el motivo por el cual le adquirí esta novela que nos ha traído hoy aquí, ya que, quedé tan absolutamente encantada con la historia de Valentina y Alessander que tenía que saber antes que nadie qué era lo que les sucedía a los secundarios de aquella novela.

De ahí que, en cuanto me llegó el pack, acompañado de una velita y sus respectivos marcapáginas, me pusiera manos a la obra.

Una vez explicadas las circunstancias de cómo este libro - libros, en este caso - llegó a mis manos, no me entretengo mucho más y os dejo con la sinopsis y la reseña de Veinte motivos para olvidarte del amor de Raquel Antúnez:

SINOPSIS

Si leíste Treinta días para salvarte el culo, no puedes perderte Veinte motivos para olvidarte del amor, donde podrás reencontrarte con Alessander y Valentina y conocerás de primera mano la historia de sus amigos; Lea y Julien.
Tengo un decálogo, un auténtico decálogo de razones por las que enamorarse no es una buena idea. Me lo repito como un mantra cada mañana, lo he memorizado, sí, porque es importante. Y enamorarme no quiero, pero, claro, hay otras cosas para las que sí que necesito a un hombre y me gustan más que a un tonto un lápiz; follar, básicamente, así que: Lea, cariño, cuidado con traspasar la línea. Todo iba cojonudamente bien hasta que conocí a Julien, el abogaducho ese que se cruzó en mi camino por culpa de mi mejor amiga. Desde el momento en que nos conocimos tuvimos una conexión especial, no tiene nada que ver con que él se viera amenazado, ligeramente, con un boli BIC a la altura de su cuello. En fin…, corramos un tupido velo. Que no, tío, que no, a mí no me pillas. El gato y el ratón, lo veo venir, ese será nuestro juego.
Os pongo en escena; salgo del ascensor, estoy acostumbrado a este tipo de situaciones, pero esta vez es más desagradable porque Valentina es una buena tía, imagínate mi cara cuando me dirijo al rellano y me encuentro con una mujer, la mujer más jodidamente sexi que he visto en mi vida, amenazándome con un bolígrafo. Flipé, sí, pues anda que ese solo fue el comienzo, menuda tortura, cardíaco me pone, en todos los sentidos, no sé si terminaré muriendo de un infarto o qué. Lo mejor es que me olvide de ella, sí, eso es lo mejor. Venga, tía loca, déjame en paz.
Y ya está, se acabó, chimpón, cada uno por su lado…, ¿o no?


OPINIÓN

Antes de comenzar con la reseña propiamente dicha, he de hacer una pequeña mención a la portada de la misma, no solo porque es muy bonita en la simpleza de la misma, sino porque es azul; el cual es mi color favorito.

Pero sobre todo, porque me parece una jugada maestra de publicidad el hecho de que, si se juntan ambos libros de esta bilogía, formen los colores de la bandera de las Islas Canarias; lugar de nacimiento de la autora. ¿Es o no un bonito e inteligente homenaje?

Entrando ya en materia de reseñas, en esta novela no se puede decir que conoceremos la historia de Julen y Lea puesto que ya tuvimos algunas pinceladas de la misma en el libro anterior, pero sí que se puede afirmar que los conocemos más en profundidad.

Algo que es muy necesario, sobre todo en el caso de ella porque sino, no se entendería bien el porqué de esa famosa lista de motivos en contra del amor. Y, como suele suceder cuando se tienen unos sentimientos tan exacerbados y/o contrarios a algo es porque se ha sufrido un trauma no superado - por mucho que se suela afirmar que sí - que aún gobierna nuestras vidas en ese aspecto.

Ese es precisamente el caso de nuestra protagonista. Personaje con el que la autora nos recuerda que hay que ser más empáticos y que, la persona que parece más feliz, tranquila o normal a nuestros ojos, cargan con sus propios problemas, pesos y demonios. Un rasgo que Julen, el protagonista masculino, también posee. Un hombre que tampoco es muy favorable a ese sentimiento llamado amor porque a él también le partieron el corazón.

Asimismo, con ella también la autora nos recuerda que no hay que englobar a todos en el mismo saco por un encontronazo o problema que se haya tenido con un miembro de un grupo - abogados en este caso -porque, cada persona es un mundo.

Otro tema muy importante es la manipulación de determinadas personas y cómo en ocasiones, madres y suegras viven las relaciones sentimentales de sus vástagos como suyas propias y por eso no paran de entrometerse en las vidas de los demás. Deporte nacional, por otra parte.

De ahí la importancia fundamental de poder decir no. Es más, de saber decir que no. Otro tema interesante tratado en la novela y un problema mucho más serio de lo que puede parecer a simple vista porque, al no saber establecer límites, la vida de la persona afectada se puede convertir en un infierno. Trampa de la que resulta muy difícil salir, para la que se requiere un enorme grado de madurez y, si es posible, la ayuda de un profesional.

Un tercer tema digno de reseñar es el las mentiras. Ninguna mentira conlleva nada bueno. Ni siquiera las piadosas porque, una vez se inicia, es bastante difícil detenerse y la bola cada vez se hace más grande, creando más daño a su paso.

Retomado el tema de las mentiras piadosas - aunque aquí no aparecen - está el último tema del que me gustaría hacer un comentario detallado por su inclusión entre las páginas de este libro. Y ese es el de que hacer el bien o ayudar a una persona en ocasiones no siempre es la mejor solución y, en muchas ocasiones, en lugar de resolver la situación, la empeoran. De ahí que pienso que, antes de ofrecerse a ayudar, es mejor enterarse de todo bien y conocer a la perfección a la persona afectada ya que nos ahorraremos un enorme sufrimiento.

Por último, no puedo olvidarme del hecho de que esta es una novela de amor con tintes de comedia romántica y muchas dosis de erotismo. Al hilo de eso, he de decir que me ha encantado que sea ella quien marque los tiempos en todo momento y que lleve la voz cantante en ese tema. Además de eso, la autora ejemplifica muy bien que el sexo y el amor son dos cosas diferentes y que, pese a ello, una relación sexual bien que puede sentar las bases para una relación amorosa.

Aunque, si tuviera que concluir el post con una idea, sería la del cierre perfecto de la idea que servía como premisa expresado en un gran arco argumental y de crecimiento de los personajes, quienes como los valientes que son, han sabido vencer sus miedos para ser felices.

Una bilogía fantástica, aunque, si tuviera que elegir una historia de las dos, me quedaría con Santa Valentina y Aless, sobre todo después de saber cómo ha derivado su historia.

¡Nos leemos muy pronto!

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