Pasaje de ida: La rosa de mis vientos de Carola Peralta

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedicada al cierre de un ciclo. ¿Por qué digo esto? Porque es la última 

novela de la trilogía La Rosa de mis Vientos, de Carola Peralta y, como hace un tiempo que no menciono su nombre por aquí, quiero recordaros que fue un premio que gané en un sorteo organizado por la propia Carola.

Y sí, debería haberla terminado hace mucho tiempo pero... se me han cruzado viajeros, colaboraciones y la vida de por medio y no ha sido hasta ahora el momento en que por fin he podido ponerme con ella. Sobre todo porque este tercer libro, pese a no estar protagonizado por Alyn y Blake, también merece mi completa atención.

Por eso, no me entretengo mucho más y prefiero dejaros con la sinopsis y mi opinión de Pasaje de ida: La rosa de mis vientos de Carola Peralta.

SINOPSIS

Claire es norteamericana, vive en Los Ángeles y estudia Arquitectura. Su carácter es ocurrente, desenfadado y decidido, y le importa muy poco la opinión de los demás en lo que respecta a sus preferencias y aventuras sexuales.
Diego es mexicano, agente de la DEA, y trabaja en la oficina regional de Guadalajara. La cautela y la calma lo caracterizan, razonando siempre antes de actuar, cualidades que también demuestra en sus convencionales relaciones amorosas.
Sin embargo, Claire y Diego se conocen en la boda de sus amigos, Alyn y Blake, rodeados de las maravillas y encantos de Playa del Carmen.
¿El amor permite superar todos los avatares de la vida? ¿Está marcado el destino o somos el resultado de nuestras elecciones? Embárcate en la apasionante aventura de estos dispares y auténticos personajes, tan sorprendentes como la vida misma.
Pasaje de ida pone fin a la trilogía La rosa de mis vientos. Una historia que te emocionará y te hará reír a partes iguales, y donde sus protagonistas se ganarán un lugar en tu corazón.

OPINIÓN

Si bien es la tercera parte de la trilogía, dado que no tiene como protagonistas a Alyn y Blake, si hay algún lector que no la considere como tal, tampoco estaría equivocado del todo. Eso sí, dado que Diego y Claire salieron en las novelas anteriores - con mayor o menor protagonismo dentro de sus roles secundarios - si hay un lector que considere a este volumen el tercero de la serie por derecho propio... tampoco estaría equivocado.

Como he dicho antes, Claire y Diego no son del todo desconocidos para los lectores de La rosa de mis vientos pues, de hecho, ya en el volumen anterior, se nos indica que mantienen una relación sentimental. Sin embargo, será aquí donde se nos narre cómo se conocen y sobre todo los primeros momentos de la misma... hasta que llega un punto de la trama en que deciden volar solos.

Al mismo tiempo, al alcanzar la categoría de protagonistas, se nos permite conocerlos un poco más en profundidad y descubrir que él huye del amor a causa de lo peligroso e itinerante de su profesión y que ella, a pesar de vivir una sexualidad de forma diversa y plena, realmente necesita sentirse querida.
No es el único punto en el que están en desacuerdo porque, mientras que él tiene una visión mucho más tradicional de la familia, ella no tiene entre sus prioridades el formar una familia y tener hijos.

Y sin embargo, a pesar de sus diferencias, saltan chispas desde su primer encuentro en una boda - confirmando así que, de una boda sale otra - tanto es así, que terminan enamorándose hasta las trancas el uno del otro. Con ello se confirma la potencia y el poder de este sentimiento y también, la autora utiliza una metáfora muy inteligente en el título al compararlo con un viaje de ida del que no se sabe el destino.

De hecho, creo que esta última frase define a la perfección, el viaje - y arco argumental - de Claire. Sin desmerecer a Diego, por supuesto, pero considero que es su personaje el que más evoluciona y el que más rápido lo hace. Sobre todo desde el momento en que decide arriesgarse a cambiar de ciudad y país sin haber madurado por completo para darle una oportunidad a una historia de amor incipiente... sin saber muy bien si tendrá final feliz.
Con su valentía demuestra que a veces sí que merece la pena arriesgarse y emprender viajes con rumbos y dirección equivocados. Tal y como dice el título y el billete que ella misma compra para no utilizar.

La preciosa historia de amor narrada entre sus páginas demuestra que sí que se puede cambiar - y madurar por amor -. Y que eso no es síntoma de debilidad, sino de madurez porque siempre hay que intentar aprender y mejorar como seres humanos. Asimismo, continúa con la tónica de las novelas precedentes en lo que a erotismo y sexo se refiere, narradas siempre con un gusto exquisito. Eso sí, sí que diré que al principio Diego cedía demasiado fácilmente a las propuestas y preferencias sexuales de Claire sin recibir el mismo grado de implicación por parte de ella.

No lo critico, pero es mi sensación. Amén de que con la inclusión de un personaje como Claire, no solo está empoderando a las mujeres en ese sentido, sino también critica al doble rasero y moralidad con respecto a la sexualidad femenina. Aplaudida y jaleada si un hombre la vive con plenitud, pero criticada y vilipendiada si es una mujer quien la vive con tanta libertad.
De ahí que el mensaje acerca de la tolerancia y los prejuicios aquí tratado sea tan importante.

Mentiría si dijera que no me quedó sorprendida el cierre de una trama del libro a mitad del mismo, dada su premura. Sin embargo, si eso no hubiera sucedido de esa manera, no se podrían haber tratado otros temas importantes en el libro: como es el de la importancia de los amigos, quienes son la familia que se escoge y que, aunque a veces tengan que hacer de poli malo, siempre buscarán que seamos felices. Amén de que a veces un revulsivo de sinceridad - aunque no guste y en ocasiones sea dolorosa - sea necesario.

Un segundo tema a destacar es la importancia de la comunicación en nuestra vida cotidiana. Y aplicándola a todos y cada uno de los aspectos de la misma porque, en buena parte de las ocasiones, es la ausencia de la misma la que provoca, crea y causa numerosos problemas. Más cuando una de las partes sí que está dispuesta a escuchar lo que el otro tenga que decirle. Por eso mismo creo que Claire no ha actuado bien durante buena parte de la segunda parte del libro y que ha sido una egoísta. Eso sí, su modo de actuar - aunque bastante equivocado - la convierte en alguien muy humano.

Por último, me ha gustado mucho que se vuelva a aplicar el tema de la tolerancia y el respeto al tercer y último gran tema de la novela, que es el de la familia. O las familias, mejor dicho porque este libro de nuevo, recuerda al lector que no hay un único tipo y que todos y cada uno de los que hay son igual de válidos que el resto. ¿Cómo? Incluyendo a familias que no están unidas por parentesco sanguíneo más allá del de la amistad que he mencionado antes. Y es que, el hecho de compartir la misma sangre no te convierte inmediatamente en el progenitor o familiar idóneo, al contrario, es la crianza la que establece esos vínculos afectivos.

Y que el hecho de ser un "mal" hijo no te convierte inmediatamente en mal padre o viceversa. En ese sentido, el mejor ejemplo es Blake.

A este éxito o no a la hora de ser buenos padres contribuye muy y mucho el amor que nos rodee, del cual también hay muchos tipos. Pero en este caso, solo hay uno válido: el bueno, el que prevalece y permanece a pesar de todas las dificultades y vicisitudes con las que se tope en el camino.
Como el de Diego y Claire.

De nuevo, dar la enhorabuena a la autora por una historia tan preciosa y adictiva, la cual me duró un día y medio a pesar del número de páginas y de que, como sepáis, el subgénero de la erótica no se encuentra entre mis predilectos.

¡Muchas gracias por el envío de los ejemplares!

¡Seguiré pendiente de tu pluma y tus historias, porque esta me ha encantado!

¡Nos leemos pronto!