Killian de Margotte Channing

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedicada a la reseña de una novela que leí en colaboración con la 

autora, a quien agradezco enormemente el envío del ejemplar - el segundo volumen de una primera serie de tres - en físico.

Quizás os suene el nombre de la misma porque ya he reseñado varias obras suyas, la última, no hace mucho tiempo y sí, también se correspondía con la primera novela de esta fantástica saga de vampiros.

Como ya expliqué en su momento cuáles habían sido las circunstancias de la recepción de las novelas, en este caso no me voy a entretener mucho más y por eso, os dejo con la sinopsis y mi opinión de Killian, el segundo volumen de Los Vampiros de Channing de Margotte Channing:

SINOPSIS

Dublín, 1884
Cuando Killian Gallagher, magistrado de la zona norte de Irlanda y uno de los vampiros más antiguos de Europa conoce a Gabrielle Touré, se sorprende al ver a una muchacha tan atractiva disfrazada de solterona. Pero lo que realmente lo seduce es su olor, que consigue excitarlo de tal manera que provoca que sus colmillos se alarguen involuntariamente, algo que no le ocurría desde que era un adolescente.
Gabrielle creció en un orfanato donde aprendió a ocultar el horrible secreto de sus padres y, aunque se siente atraída por el misterioso Killian Gallagher, debe huir cuanto antes ahora que la han descubierto. Pero un vampiro que ha encontrado a su compañera, la única capaz de descongelar un viejo corazón como el suyo, es capaz de todo para mantenerla a su lado.

OPINIÓN

La premisa de encontrar a la velisha de cada miembro del grupo de vampiros que ya nos indicaron en la primera entrega, vuelve a cumplirse en esta segunda entrega. Así que por esa parte no sorprende, lo que sí lo hace es que, evidentemente cada uno es diferente del otro ya que las circunstancias son diversas y sobre todo, el orden en el que lo terminarán haciendo.

En mi caso, por ejemplo, si bien su personaje también fue introducido en el primer libro, no esperaba que Killian fuera el segundo afortunado en conocer el amor. Mis predicciones iban completamente encaminadas hacia Fenton. Pero, tendré que esperar un poco más para conocer cómo lo hará.

Killian es un hombre con un amplio sentido de la justicia y un enorme afán protector. Rasgos muy presentes a lo largo de la novela y, aunque parezca un poco extraño, es también un vampiro con una inmensa capacidad de amar. Todos ellos motivos por los que su personaje me gustó tanto. Y sí, el amor romántico ocupa muchas páginas de su historia, pero no hablo de ese tipo de amor: hablo del sentimiento que tiene hacia su pupila Amelie, a quien quiere como si fuera una hija y, aunque sufre por estar separado de ella, lo hace porque sabe que así recibirá la mejor educación posible.

Precisamente será Amelie el personaje que más me gustó de la novela ya que es toda una señorita con carácter y voz propia - poco habitual para la época en la que vive - y un talento casamentero del que ni ella misma es consciente. De hecho, será Gabrielle, su institutriz, quien llame la atención de su tutor... despertando un deseo y unas ganas de vivir que creía perdidas desde hacía tiempo.

En él la aceptación y el desarrollo de los sentimientos se produce de un modo más o menos natural y progresivo. Sin embargo, en mi opinión, en Gabrielle todo ese proceso se produce de manera demasiado brusca. He de confesar más momentos que dieran indicios del nacimiento de los mismos - o al menos de una atracción de modo más evidente - por parte de ella.

Sin embargo, puedo entender este carácter introvertido porque Gabrielle es mucho más de lo que aparenta. Muy buen usado el recurso de que las apariencias engañan por este canal.
Es un comportamiento motivado por el miedo a ser descubierta. Por eso, no será hasta que se siente protegida del todo que no abraza su verdadero yo y decide mostrarse al mundo tal cual es en un recorrido y crecimiento vital de lo más interesante. De ahí que me haya gustado mucho el mensaje que envía a través del cual un buen amor conseguirá sacar siempre la mejor versión de uno mismo.

Del mismo modo que, al igual que en la novela anterior, en esta se nos introduce una subtrama con gran peso en futuras entregas de la que estoy deseando saber más porque, a medida que termino los libros, mi interés crece. Pero, el inicio de la misma está muy bien desarrollada en este libro, sobre todo porque refuerza el carácter protector y justiciero de Killian de un modo muy comprensible y natural que para nada parece forzado o exagerado.

Por último, no puedo no concluir esta entrada sin hacer referencia al inicio del salseo del siguiente libro porque... ¡menuda pareja la que se viene! He adorado a Cian y a Amelie desde ese primer encuentro en el que han saltado chispas y sobre todo, tengo mucha curiosidad por ver cómo él arregla el desaguisado en el que se ha metido por un lío de faldas. Más cuando Killian se entere del interés que tiene por su pupila porque, a pesar de pertenecer a especies diferentes, me da que no va a ser un padre consentidor de este romance.

Como sucedió en la novela anterior, es una novela que se lee muy ágil y fácilmente, no solo porque tiene pocas páginas, sino porque la historia atrapa desde la primera página y provoca que el lector no quiera soltarla hasta haberla terminado.

¡Muchas gracias por querer colaborar conmigo!

¡Nos leemos pronto!