Me lo vas a decir de Marta Salvador Vélez

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedica a la reseña de un libro muy especial. En primer lugar, quiero 
agradecer a la autora su confianza en mí por el envío del ejemplar y sobre todo, por permitirme conocer su pluma puesto que, a pesar de haberla visto mucho por redes, no la conocía.

No voy a entretenerme mucho en la parte introductoria de esta entrada y por eso, prefiero dejaros con la sinopsis y mi opinión de Me lo vas a decir de Marta Salvador Vélez:


SINOPSIS

TERRIBLEMENTE SEXY Y ADICTIVA. LA COMEDIA ROMÁNTICA DEL AÑO. 
Que las apariencias engañan y que los polos opuestos se atraen son dos premisas que Roque Riera y Amanda Salas no van a tener más remedio que comprobar con su propia experiencia. Roque Riera es el director del yacimiento arqueológico donde Amanda Salas debe terminar su doctorado. Un tipo malhumorado, en constante negación y con una rudeza impactante que viene a chocar con la dulzura de Amanda y su gran inteligencia. Pero como las apariencias engañan, tras su cabeza rapada, sus tatuajes, sus cadenas y su pendiente, Roque esconde una personalidad entregada. Amanda, una fortaleza y una energía aplastantes que a él lo dominan. En medio, todos los impedimentos: doctor y doctoranda, once años de diferencia, un patrocinador poniendo trabas, secretos inconfesables... Que los polos opuestos se atraen es una evidencia. Que la atracción puede no ser suficiente, una verdadera incógnita.

OPINIÓN

Antes de comenzar con la reseña propiamente dicha, he de hacer un comentario al respecto de la portada, la cual me encanta y captura mi atención desde el principio. Sin embargo, aunque presenta de primeras que ambos son diametralmente opuestos, la realidad es que el dibujo no le hace justicia al personaje de Amanda, porque no la considero tan pija y "remilgada" como lo es en realidad.

Si bien ya desde la portada no está diciendo que no hay que dejarnos llevar por las primeras impresiones porque, en muchos casos, son equivocadas.

Sé que a veces el hecho de que una novela haya ganado un premio no es síntoma de que tenga calidad. Sin embargo, este no es el caso. Es un premio más que merecido en mi opinión. Y sobre todo, sin paños calientes, he de decir que, pese a que estamos en enero y que aún queda mucho año, es una de mis mejores lecturas del año.

Es, como he dicho antes una lectura que explota muy bien el cliché de que los opuesto se atraen y el enemies to lovers, los cuales son mis favoritos. Pero además, trabaja con maestría la enorme cantidad de malentendidos a los que se enfrenta la pareja y no solo juega con los personajes, también con el lector.

Crea un universo y un puzle tan bien construido que, poco a poco, las piezas encajan. Demostrando, de nuevo, que las apariencias engañan y que todos los personajes son mucho más de lo que parecen.

Es la historia de Roque y Amanda. Y me sorprendió para bien que él fuera arqueólogo y que ella estuviera sacándose el doctorado. En mi caso, nunca antes había leído una novela romántica con protagonistas arqueólogos y estudiantes de historia. No sé si lo sabéis, pero no es una carrera y/o una profesión que no suele llamar la atención, ni en el mundo literario ni en el mundo real. Y, como historiadora que soy, agradezco enormemente iniciativas de este tipo para contribuir a que esas ideas preconcebidas sobre nosotros, cambien.

Tranquilizaos porque, en el caso de que no seáis unos apasionados de la historia, no os preocupéis porque, si bien sí que hay referencias a determinados datos históricos y se incluyen términos más específicos sobre excavaciones, no os va a resultar complicado o difícil continuar con la lectura de la historia.

Con Amanda he empatizado enseguida porque, al igual que ella no tengo un físico muy poderoso y por tanto, cuando iba de excavaciones, la gente daba por supuesto que no iba a ser capaz de aguantar y seguir el ritmo, cuando no fue así. Y por eso, me ha gustado mucho que recuerde de este modo que las apariencias engañan y que no hay que juzgar un libro por su portada. A veces, podemos equivocarnos.

Asimismo, me ha gustado que su personaje sea el canal a través del cual, la autora ponga de relieve cuán fundamentales son los abuelos en nuestras vidas y cómo parece que hemos olvidado que antes ellos se sacrificaron para cuidarnos cuando nosotros, no pagamos con la misma moneda y solemos verles como una molestia o una carga que no estamos dispuestos a soportar.

No será ese el único tema de denuncia a través del cual usa a Amanda porque, de nuevo, con ella, da voz y voto a lo difícil que es convivir con determinadas enfermedades, las cuales, a pesar de ser muy comunes, continúan siendo muy desconocidas para la inmensa mayoría de las personas. Y cómo ese desconocimiento lleva a malentendidos o incluso ayuda, que más que beneficiar, perjudican.

Por supuesto, no podemos olvidar tampoco la crítica que hace acerca de cómo las mujeres tenemos que trabajar y esforzarnos el doble para alcanzar la misma validez y reconocimiento que nuestros colegas masculinos a ojos del público, especialmente en "trabajos de campo". No es la única situación machista denunciada entre sus páginas porque también hay referencias a que solo sí es sí y que ningún hombre ha de utilizar su posición de poder para aprovecharse de las mujeres, mentirles, amenazarlas e incluso propasarse con ellas. Y al mismo tiempo, me ha gustado mucho que lo incluyera para que, en el caso de que alguna mujer lo leyera y lo hubiera sufrido, denunciara y que este tipo de comportamientos no queden impunes. A ver si así, se dan cuenta de la ilegalidad que están cometiendo y como los criminales que son, den con sus huesos en la cárcel y reciban todo el peso de la justicia.

Interesante también por lo poco habitual del mismo, al menos en mi caso, es la inclusión de la problemática que supone tener un hijo con altas capacidades. Al menos en lo que a la educación se refiere. De ahí que sea fundamental la detección a tiempo porque, en muchos casos, determinados comportamientos de desidia, desinterés e incluso rebeldía en el aula, lo que en realidad ocultan son niños que no ven satisfecha su curiosidad o no ven alcanzado su nivel de comprensión lectoescritora.

La familia es también uno de los temas fundamentales a lo largo de la novela. Y con la inclusión del mismo, lo que la autora pone de relieve es que no existe un tipo de familia que sea válido, sino que todas lo son. Monoparentales o tradicionales. Y que nadie tiene el derecho a criticar el número de personas que la componen ni juzgar el modo en que estamos criando a nuestros hijos.

Relacionado con esto, está muy bien hilado un comportamiento que es muy común en nuestra sociedad como es el de ampararnos en las buenas intenciones para soltar determinados comentarios que, en realidad, más que ayudar, crean dolor. Y en ese sentido, el mejor ejemplo es la hermana de Roque. Con un motivo, por supuesto.

Por supuesto, también nos recuerda que la familia no tiene por qué ser de sangre porque para ello están los amigos, que son la familia que se elige y que en muchos casos, protegen y quieren tanto o incluso más que una persona con la que compartimos vínculo sanguíneo. Joana aquí, actúa como una auténtica leona y encarna a la perfección esta idea.

También me ha gustado mucho la inclusión de un personaje como Reve. De entrada porque tener un nombre de dios prerromano me parece una pasada de molón. Amén de que confirma que es hijo de su padre y que este tiene la profesión que tiene. Y sí, por si os lo estuvierais preguntando, en el caso de que, algún día tuviera hijos, yo también le pondría un nombre histórico o con un significado particular. Él, a su vez, - si bien Amanda en ese sentido también lo representa bastante bien - recuerda que la madurez no va asociada a una edad, sino que está relacionada con la mente y la personalidad de cada uno.

La pluma de la autora es valiente también al atreverse a poner las cartas sobre la mesa y poner de relieve cómo, a día de hoy, el estigma de determinados temas continúa presente e incluso, parece que nos da vergüenza y miedo pronunciarlos o hablarlos en público. Critica también que la desinformación continúa muy presente hoy día. Curioso porque, en una sociedad caracterizada por el exceso de información, en lo que respecta a determinados temas, parece que nos hemos quedado atascados.

Al hilo de esto, nos hace ver que el principal problema de la pareja Roque y Amanda es de la comunicación. Y que este, o mejor dicho, la ausencia de este, es el principal problema de nuestra sociedad actual. Amén del principal responsable de los malentendidos y discusiones entre las personas. Sin tener por qué ser pareja necesariamente.

Y es que, continuamos pensando que comunicarnos y exponernos es un síntoma o un comportamiento de debilidad, cuando es justo al contrario. Por eso, también me ha gustado que, cuando tengamos problemas en este sentido, si es necesario, recurramos a la ayuda de un profesional para que nos ayude a gestionarlo todo de la mejor manera posible y más adaptada a nuestra idiosincrasia. De nuevo, con ello denuncia la vergüenza y los prejuicios existentes acerca de la salud mental. Especialmente si la comparamos con el tratamiento de otras enfermedades de diferentes partes del cuerpo.

Como podéis sobreentender, además de todo lo que he relatado, esta es también una historia de amor. ¡Y menuda historia! Ya he esbozado algunos de los diferentes tipos de amores mencionándolos en párrafos anteriores, así que ahora me centraré en el amor romántico puesto que lo tratan desde dos perspectivas diferentes, recordándonos también que tampoco hay una manera única para vivir una historia de amor... siempre y cuando ambas partes estén de acuerdo en vivirla del mismo modo.

Así, por ejemplo Joana y Samuel representan las nuevas formas de amor existentes mientras que Roque y Amanda representarían una historia de amor más "tradicional" cuyo salseo me ha encantado desde el principio. Y también porque ambos cargan con una coraza y escudo protectores más o menos gruesos y resistentes de los que tienen miedo a desprenderse.

Por ello, como personajes y parejas son poco habituales. Aunque, una protagonista cuyo nombre significa "destinada a ser amada" no puede no tener una historia de amor épica y con mucha base de reconquista e historia. Demostrando así que incluso las torres más altas pueden llegar a caer y que el amor ha de ser paciente y que hasta la roca más gruesa puede resquebrajarse bajo el impacto de las olas del mar. Muy inteligente esa metáfora, sobre todo a la hora de compararlas con las personalidades de los protagonistas.

Y por supuesto, huelga decir que, pese a ser especialito, Roque encarna a la perfección a un historiador de pro y por ello, sin que a mí me gusten especialmente los calvos y/o rapados - me van más las buenas melenas - me he enamorado por completo de él y del modo en que se declara. Tanto, que si me hace un huequito, yo también quiero estar en su clan.

Una novela que me ha encantado de principio a fin.

¡Muchas gracias Marta por querer colaborar conmigo!

Si este es mi primer contacto con tu pluma, tengo que estar pendiente a todo lo que has publicado y vas a publicar sin duda. 

¡Nos leemos pronto!


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