De la "Vie en Rose" a la vida en "Grease" de Déborah. P. Gómez

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedicada a una novela que leí por el simple y puro motivo de que 

conocía la pluma de la autora y, como todos mis contactos previos con su plumas han sido más que satisfactorios, ¿por qué no salir de mi zona de confort?

Pero que eso no os lleve a pensar una impresión equivocada de que no sea especial porque sí que lo es ya que se trata de la primera novela que leo que tiene publicada con una editorial. Y, aunque en digital - de momento - eso no debe de ser motivo para considerarlo como algo negativo. Al contrario, debemos hacerlo como un único paso previo para alcanzar el formato en papel con ellos.

No me voy a entretener mucho más en esta parte introductoria de la publicación, y por eso, os dejo con la sinopsis y mi opinión de De "La Vie en Rose" a la vida en "Grease" de Déborah P. Gómez:

SINOPSIS

¿Quién dijo que las segundas partes nunca fueron buenas?

Vega siempre supo que algún día sería una diseñadora famosa, aunque para ello tuviera que dejar atrás sus humildes orígenes y romper con Orión, el amor de su vida. Pero ahora que lo tiene todo, su perfecta vida de color rosa está a punto de cambiar.

Dispuesta a ahogar sus penas, Vega se emborracha hasta perder el conocimiento. Horas después, despierta en una aldea asturiana que dice ser su pueblo natal. Pero Asturias ha cambiado mucho desde la última vez que estuvo allí... En vez de escanciar sidra, ahora beben batidos de manzana, visten y bailan como si se hubieran escapado del musical Grease y han sustituido las gaitas por música rockabilly. ¿Cómo ha llegado hasta allí? Y lo más importante… ¿por qué todos creen que viven en 1952?

Solo hay una cosa que no ha cambiado en este tiempo y es Orión, que sigue guardándole rencor por su rechazo y está dispuesto a demostrarle lo que se ha perdido estos años.

OPINIÓN

En esta novela romántica breve con tintes cómicos, conoceremos la historia de Orión y Vega. Y ya desde el principio, he de decir que, como apasionada de la mitología griega que soy - y estudiosa, además - los nombres seleccionados me flipan. Si bien es cierto que jamás los elegiría en el caso de que decidiera tener hijos. ¿Con mucha personalidad? Cierto es, pero bastante susceptible de burlas también.

Sin embargo, con esta elección"a priori" Déborah revela de manera muy inteligente el tema principal de esta novela, así como las vidas de sus protagonistas.

Así, Vega, tocaya de la estrella de la constelación de la Lira y quinta más luminosa del firmamento, es como su homónima humana, quien también es una estrella. Solo que en este caso, se debe a que es una diseñadora famosa. Sin embargo, son pocas las personas que conocen que, el nombre de dicho astro no es otro que el de "cayendo" y, de nuevo, ejemplifica perfectamente cómo la diseñadora empieza la novela.

Su personaje representa perfectamente que, con tesón y esfuerzo los sueños se cumplen, pero que, de nuevo, resulta un error idealizarlos porque, todo tiene su parte clara y su parte oscura y, como podéis imaginar, es esa cara b, la que no nos suelen contar. Justo lo que le sucede a ella, porque, si bien ha triunfado en la "Ciudad de la Luz" el brillo de la misma la ha opacado hasta el punto de convertirla en una persona que, pese a que, hipotéticamente, tendría todo para ser feliz, no lo es.

Y ese desarraigo del que se quejaba mientras vivía en el pueblo del norte de España del que reniega en su vida de famosa, vuelve a sufrirlo desde las alturas del firmamento del star system al que pertenece.

Estas circunstancias también sirven para hacernos ver que la fama no es algo tan positivo como puede parecer y que por tanto, no todo el mundo está preparado para convertirse en famoso y afrontar las consecuencias que supone, no solo un cambio tan brusco y radical de vida, sino también que, en lo que a la exposición de su vida personal se refiere. Porque, desgraciadamente, las líneas entre el aspecto público y el privado parecen estar cada vez más difuminadas.

De ahí que, en no pocas ocasiones, la persona real que se esconde tras el personaje famoso es bastante diferente de la que solemos ver en los medios de comunicación y Para bien o para al, porque, si bien es cierto que en la inmensa mayoría son simpáticos y un poco tímidos, tampoco estamos exentos y libros de imbéciles y maleducados.

Pero, en este caso, la autora decide utilizar estas circunstancias para recordar lo importante que es la práctica efectiva de la empatía en nuestra vida cotidiana y sobre todo, en la importancia de conceder segundas oportunidades vitales.

Y será justo esa idea, la premisa original de la subtrama amorosa puesto que a Vega se la concede, sí. Pero acompañada de un súper viaje en el tiempo a la década de los años 50, paradigma del estilo pin-up que se ha convertido en atemporal. Y es más, en ocasiones, en un estilo de vida.

Evidentemente, con este traslado, lo que la autora hace es, no solo recordar nuestros orígenes y tener siempre presentes que debemos ser más humildes, seamos famosos o no. También, se propone realizar un homenaje a la vida en los pueblos. Más, al compararla con la frenética París. Pero no se detiene ahí, sino que explica los aspectos positivos y negativos de la vida en las pequeñas comunidades.

Así, el apoyo entre los miembros de la misma es mucho más directo. E incluso puede decirse que más leal, pero también critica que el cotilleo y la falta de intimidad no solo es un rasgo definitorio de los famosos, sino que también los pueblos pequeños lo sufren. El ser humano es sociable por naturaleza y el cotilleo es el deporte, no nacional, sino universal.

Junto a ello, también recuerda que, no solo los motes - algunos que realmente se las traen -, las malas relaciones y odios se heredan y por eso, en muchos casos, generaciones contemporáneas que poco o nada tienen que ver con los que dieron origen a todo, a día de hoy, continúan sufriéndolos.

Pero este traslado también sirve para que el lector se dé cuenta a través de los ojos de la protagonista de cómo la situación de la mujer ha cambiado en apenas cincuenta años, si bien es cierto que, aún a día de hoy, existe un largo camino que debemos recorrer en aspectos como la validez de una mujer en determinados puestos de trabajo o la libertad o no con la que disfrutamos de nuestra vida sexual. Demostrando por tanto, que, como sociedad seguimos siendo muy machista.

Pero, es también una novela que recuerda la importancia y el impacto que tienen los primeros amores en nuestras vidas. Para bien y para mal. Bien dice el saber popular que "el primer amor nunca se olvida" y en este caso, tiene toda la razón del mundo porque, contribuyen muy y mucho a la idealización del concepto de amor y sobre todo, sirven de mara de medir y comparación con el resto de relaciones sentimentales importantes que tendremos en nuestras vidas.

Y, de nuevo, nos recuerda que comparar es un error y que, al contrario, el conceder segundas oportunidades vitales: las personas evolucionamos y con nosotros nuestros sentimientos o la escala de prioridades en nuestras vidas. Además, hace hincapié en la idea de que, dependiendo del momento de nuestras vidas en el que nos encontremos, nuestro concepto e idea de amor variará. Y que por ello, tampoco hay que sentirse mal por ello, al contrario, es lo más natural.

Eso sí, subraya, y es un aspecto que también me ha gustado mucho, el hecho de que, a pesar de ser una segunda oportunidad, se parte de cero. Y eso quiere decir que no habrá alusiones al pasado o recriminaciones de ningún tipo porque si no, la relación está abocada al fracaso. Amén de que, el supuesto perdón concedido en su momento no se ha hecho, permaneciendo así en la página a la que nunca se fue capaz de darle la vuelta.

Junto a ello, es una historia muy realista y un canto al buen amor porque, quien bien te quiere, lo hará libre y buscará siempre que el otro sea la mejor versión de sí mismo. Y junto, a ello, recuerda que, si bien es fuerte, a veces no es suficiente. Sobre todo porque, si los miembros no nadan en la misma dirección, las circunstancias, la cotidianeidad y el brillo de las distracciones, pueden llevar a que se termine.

Junto a ello, incide en que el sentimiento, al pertenecer al campo de la subjetividad, es diferente en todos y cada uno de nosotros. Por eso, tratar de hacerlo igualitario es un error. Del mismo modo que es otro error tratar de hacer que una persona nos quiera como nosotros queramos que nos quieran.

De ahí que, en ambos casos - siempre, en realidad - la comunicación sea pilar básico y fundamental en la construcción de una relación sólida con aras de durabilidad. Sin embargo, y de nuevo, vuelve a tratarlo para demostrar que, por mucho tiempo que pase, sigue habiendo campos de nuestra personalidad que parecen haberse anquilosado - muy buena metáfora con la relación de Orión y Vega, por otra parte - y la consideración de esta como un síntoma de debilidad al quedar expuesto al otro, continúa prácticamente idéntico. De nuevo, un error porque la comunicación, si es efectiva nunca será un síntoma de debilidad. Al contrario, es pura fortaleza. Y además, es justo la ausencia de ella la que provoca que aparezcan problemas, dudas y malentendidos.

Incide en un aspecto que es de cajón, y esa es que el amor aparece cuándo y dónde menos se le espera y que por eso, en ocasiones, a pesar de que es fuerte, al no tener todo a favor, fracasa. No está solo en él. Como he repetido antes, depende muy y mucho del interés, esfuerzo y sacrificio de las personas que conforman la pareja. De ahí que, como si de un sueño se tratara, la autora anima a luchar por este también.

Por último, no puedo no concluir este post sin decir que, es uno de los modos más originales en los que he visto tratado el tema del hilo rojo del destino. Y no ya porque conecte a través del tiempo, sino porque lo hace aderezado y acompañado de un hilo musical de lo más ecléctico, convirtiendo la novela novela en una historia de lo más agradable, refrescante y cautivadora.

Porque el amor siempre te hará resplandecer y sobre todo, provocará que tu vida deje de ser gris.

Aviso de que, una vez empezada, no vais a querer parar. Así que, es ideal para cualquier tarde de verano.

¡Nos leemos pronto!