El monasterio de Piedra de Ager Aguirre

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedicada a una novela que leí en colaboración en digital con el autor, a 

quien agradezco enormemente el envío del ejemplar en digital. Y también, que haya confiado en mí y renovado dicha confianza.

Como podéis imaginar, no es la primera vez que leo su pluma, si bien es cierto que, con esta novela, he cambiado completamente de registro, de ahí que es como si la conociera por primera vez.

Junto a ello, he de añadir también que esta novela participa en el premio Literario de Amazon, así que, con ella, continúo con la dinámica de opinar acerca de personas que concurren en él.

Sin más, os dejo con la sinopsis y mi opinión de El monasterio de Piedra de Ager Aguirre:

SINOPSIS

En los lugares más bellos pueden cometerse los asesinatos más deleznables.

Cuenta la leyenda del parque del Monasterio de Piedra que este surgió tras una batalla entre ángeles y demonios, una lucha que ganó el bien sobre el mal... hasta la reciente aparición de un cadáver en una de sus grutas.

Un asesino y un equipo de investigación de la Guardia Civil revivirán ahora esa contienda en este thriller policíaco ambientado en uno de los lugares más turísticos de la provincia de Zaragoza.

¿Quién vencerá esta vez?

OPINIÓN

Antes de comenzar con la opinión propiamente dicha, he de decir que, siendo la opinión de una novela negra, resulta mucho más complicado profundizar en determinados aspectos y detalles de la trama, puesto que el riesgo de spoiler es mucho más alto que en otros géneros.

El título es muy informativo y desde el principio por tanto, como podréis imaginar, el monasterio sirve, no solo como escenario, sino también como uno de los personajes principales. Junto a ello, en mi caso personal, he de decir que yo no lo he visitado, pero que no he tenido ningún tipo de problema a la hora de ubicarme y moverme por él, ya que, al haber incluido un mapa antes del inicio de la historia, se facilita este aspecto mucho más.

En este caso en concreto es una novela que se lee bastante rápido y que tiene como eje central de la novela a la mujer. Tanto desde el punto de vista positivo... como negativo. Y con esta doble mención en extremos tan opuestos, el autor lo utiliza como canal para tratar y desarrollar una serie de temas importantes e interesantes al respecto que la mujer ocupa en nuestra sociedad.

Así, desgraciadamente, cuando hay asesinos en serie, el sexo de las víctimas suele ser, en muchos más casos, femenino que masculino. Y esa es una reflexión interesante que invita a pensar cómo, aún hoy, las mujeres seguimos siendo consideradas como el sexo débil. Cuando no tiene por qué ser así. Justo como sucede aquí.

Pero también sufrimos y soportamos el machismo a diario en determinadas profesiones, consideradas "de siempre" como masculinas, pero que, poco o nada tienen que ver con el sexo de la persona que lo desempeña. Aun así, si es una mujer quien lo realiza, ha de sufrir comentarios y menosprecios continuos que la obligan a esforzarse el doble o el triple que cualquiera de sus colegas masculinos para demostrar su valía. De nuevo, como sucede aquí con la inspectora encargada de llevar a cabo y gestionar la investigación de la ola de crímenes.

También me ha gustado el recordatorio necesario de que las mujeres nos enfrentamos a esas malas valoraciones y menosprecios, no solo en el ambiente laboral. También nuestros físicos suelen ser también blanco de todas las críticas y es un recurso fácil a la hora de insultar. Aunque, lo que es más triste aquí es que, precisamente este comportamiento suele ser mucho más habitual entre mujeres, demostrando que existe también muy poca sororidad entre nosotras.

Esta segunda crítica está tratada de un modo en la novela que, si bien me ha parecido algo retorcido, también he de admitir que considero muy necesaria la dinámica que ejecuta su superior para con Paula al tratar de hacerle convertir sus debilidades en fortalezas. Hay quien puede pensar que que es demasiado brusco, pero, en mi caso, soy de las que piensa que todo el mundo merece un revulsivo que nos haga despertar de golpe. Y en este sentido, es una crítica también hacia el positivismo y el buenismo de nuestra sociedad.

Dinámica que es falsa y que por tanto, no nos enfrenta a la dureza de nuestra sociedad en el día a día.

Y retomo el asunto de la falta de sororidad de nuevo para, asociarlo a una falta de libertad e igualdad en lo que al comportamiento de mujeres y hombres se refiere porque, la vara de medir es bien diferente a la hora de juzgar y criticar a los demás. Y, como siempre, las mujeres somos quienes salimos peor paradas y más perjudicadas. Así que me gustó mucho esta reivindicación incluida en el libro.

Pero también sirve para criticar lo fácil y gratuito que es causar daño a los demás. Más en esta época de uso y abuso de redes sociales, en la que parece que la impunidad campa a sus anchas. Y aquí incide en la importancia y el poder que las palabras tienen, las cuales llegan a causar un daño mucho mayor que determinadas acciones y gestos. El daño perdura más y es más invisible. Amén de que, a causa de esto, ha generado nuevas formas de acoso que deberían ser más perseguidas y castigadas como el cyberbullying.

Otro tema interesante es el de la dualidad que nos rodea. Y me parece fundamental que haga hincapié en la inexistencia del maniqueísmo que afirma que todo es blanco o negro, o bueno o malo. Al contrario, entre ambos extremos existe una amplia gama de grises que enriquece mucho nuestra cotidianeidad y que permite un aperturismo mental que, de otra manera, no existiría.

Hay que saber aceptar nuestras partes positivas y sobre todo, también las más negativas, puesto que todo forma parte de nuestro ser. Y esa dualidad también puede encontrarse en determinados lugares porque, ¿no habéis escuchado nunca o habéis visitado un lugar donde se acumulan muchas leyendas y malas energías?

Aquí sucede con el parque y, la persona que mejor lo identifica es el monje cisterciense que habita en el parque y el monasterio.

Misma contraposición con la que recuerda que las apariencias engañan - y aquí el asesino lo refleja a la perfección - y que por eso, hay que dejarse guiar a veces por las primeras impresiones e instintos, pero también, es conveniente escuchar las dos versiones de la historia... antes de formarnos la nuestra propia. Rol de las mujeres a lo largo de la historia incluido. Porque, he de decir que una teoría aquí sugerida ha sido completamente novedosa y jamás hubiera pensado en ella como tal, pero que, a posteriori, he caído en la cuenta de que también pudiera ser perfectamente plausible.

Y por último, hay espacio para las relaciones personales y sentimentales en esta novela. No solo al incluir las redes sociales como uno de los nuevos métodos con los que conocer a nuevas personas, con sus virtudes, riesgos y defectos, sino porque, de nuevo, se demuestra que, no importa quiénes seamos y a qué nos dediquemos, el miedo a la exposición y a la asunción de los sentimientos continuará existiendo. Principalmente porque se asocia como un síntoma de debilidad.

Y en ese sentido, no me ha gustado nada que Paula ejerza un poco de perro del hortelano para con ese personaje interesado en ella - cuyo nombre no revelaré - y que se haya fingido ciega e ignorante ante comentarios y actitudes nada discretos a la hora de demostrar que realmente sí que tenía sentimientos por ella. Mientras que eso, no ha sucedido con otro personaje. Aunque, en este sentido, he de decir que ha sido muy realista porque, tendemos a huir de sentimientos y preferimos refugiarnos en encuentros puramente sexuales antes que en sentimentales puesto que el daño, si termina, será menor.

En cuanto a la subtrama del asesino - más allá de lo complicado que me han resultado los escenarios donde ejecutaba a sus víctimas - no puedo comentar mucho porque, no quiero revelar su identidad. Solo diré que no lo vi venir y que, durante buena parte de la novela sospeché de más de un personaje porque todos tienen un toque "raro" que los convierte en los candidatos ideales para ser asesinos en serie potenciales. 

Y ese aspecto también será el que os motivará a continuar leyendo hasta el final ya que, una vez iniciado no se para.

¡Mucha suerte en el concurso!

¡Nos leemos pronto!