Portadora de hechizos de Cristina Gordillo Iracheta

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedicada a la opinión de una novela que leí en colaboración con la 
 autora, a quien agradezco enormemente el envío del ejemplar en físico. Además de que es totalmente de mi estilo, y por eso, me ha dado rabia tener que posponerla tanto. Aunque, ya sabéis que, se metió de lleno el proceso de oposición y claro, la prioridad es la prioridad.

Sin embargo, ha llegado el momento y el turno en este espacio y por eso, no me voy a entretener mucho más en la parte introductoria de esta publicación y prefiero dejaros con la sinopsis y mi opinión de Portadora de hechiceras de Cristina Gordillo Iracheta:

SINOPSIS

Año 1539. Ribas de Campos. Manuela y María, madre e hija son parteras de profesión pertenecientes a una larga estirpe de mujeres con dones especiales. Viajan de pueblo en pueblo con su vieja mula cargada de remedios cuando descubren un plan maquiavélico urdido por don Pedro, conde de Lema que, al sentirse amenazado por ellas, las acusa de hechicería comenzando una persecución sin tregua para acabar con sus vidas y silenciarlas para siempre.

Año 2019. Madrid. Ana es una mujer de mediana edad dueña de una clínica ginecológica, que a través de sus sueños se convierte en espectadora de excepción de la huida de las valientes Manuela y María en las condiciones más adversas.

Dos épocas se unen para hacer justicia en una trepidante historia que nos desvelará un gran número de secretos, acontecimientos e intrigas, alternando entre el siglo XVI y el siglo XXI.


OPINIÓN

Antes de comenzar con la opinión propiamente dicha, he de hacer un comentario al respecto de la portada. No solo porque me parece espectacular de preciosa que es, sino también porque, solo aquellos lectores que terminen de leer la historia, descubrirán que representa un momento bastante importante en la historia. O dicho de otro modo, es de esas portadas inteligentes y reveladoras de esas que tanto me gustan a mí.

Esta es una historia que tiene una doble línea temporal y que mezcla bastante bien la historia y la magia. Profundamente femenina y feminista, la elección de estas dos historias paralelas casi podría decirse, sirve para denunciar que, según qué aspectos de la sociedad sobre todo en lo que a mentalidad y creencias se refieren... no han cambiado tanto.

Como por ejemplo, el rol y el número de mujeres presentes en la ciencia. Bastante menor que el de sus colegas masculinos. Pero también, cómo, si de manera habitual debemos esforzarnos el doble o el triple que nuestros colegas masculinos en cualquier profesión, cuando se trata de profesiones y estudios relacionados con la ciencia ese esfuerzo es mucho mayor.

Parece extraerse de esto que, nuestra presencia, más que ser bienvenida, incomoda. Y por eso, no nos hacen sentir bienvenidas y se nos considera un peligro, por competencia directa. Eso sí, lo que antes se hacía en cambio era la declaración de brujería y hechicería porque así, los poderes políticos y eclesiásticos actuaban con toda la dureza del mundo.
La realidad en muchos casos era que, no es que hicieran nada malo, sino que, como estaban más especializadas en el tratamiento y curación de las enfermedades femeninas que los galenos masculinos, no convenía la existencia de una competencia tan feroz.
Amén de que la sospecha del origen pagano de ese conocimiento vetado para las mujeres - iletradas en buena parte de la población sin importar su estatus o estamento social - les daba vía libre y manga ancha para juzgarlas y ejecutarlas como les viniera en gana.

Afortunadamente, las cosas sí que han cambiado y, aunque escasa sí que hay mujeres en la ciencia. E incluso especializadas en el tratamiento de enfermedades que tienen que ver con el cuerpo de la mujer, como en el caso de Ana. De ahí que está muy bien traída la adaptación y la adecuación de los antiguos personajes en la sociedad actual.

Y al respecto de las mujeres, envía otro mensaje muy importante. Fundamental, diría yo, acerca de la falta de sororidad que existe en nuestra sociedad en la que tendemos a considerarnos como enemigas y rivales, más que apoyarnos las unas en las otras. Un error porque, ya de por sí debemos hacer frente a las dificultades que supone la disparidad para con los hombres.
De ahí que, en lugar de centrarnos más en criticarnos las unas con las otras lo que deberíamos hacer es apoyarnos y convertirnos en nuestras aliadas. Solo así veremos cuán poderosas somos y toda la fuerza que tiene nuestra unión.

La religión cristiana y la pagana también es un tema muy bien desarrollada en esta novela. Y cuando digo religión pagana no me refiero a religión como tal, sino que, en el cristianismo no existe la creencia en la reencarnación, pero este sí que es dogma presente en otras. Y como todos los personajes que aparecen en la línea temporal del siglo XVI han encontrado la manera de llegar hasta el año 2019, a eso es lo que me refiero.
Además de poner de relieve y hacer hincapié en la posible existencia de las vidas pasadas, he de conceder a la autora el esfuerzo en el modo en que ha buscado y encontrado que todos esos roles antiguos se hayan trasladado con todo el sentido del mundo hasta la contemporaneidad.

Relacionado con la reencarnación, juega muy bien y mucho con la idea de destino. Un tema que, de nuevo, puede relacionarse con el "paganismo" o la hechicería. La realidad es que, no podemos escapar de él y por tanto, no importa el tiempo transcurrido, a la larga encontrará el modo para que lo pongamos en marcha.
Incluso en sueños, de ahí que juegue muy bien con la creencia popular que indica que, en realidad, los sueños no son otra cosa en ocasiones que recuerdos de una vida pasada, presente en los últimos confines del subconsciente pero que nuestro cerebro, de manera conveniente o no, ha decidido no sacar a la luz.

Hace una crítica bastante rotunda también a la obsesión por la fama y el poder. Y cómo hay personas sin escrúpulos con tal de mantenerse en él. A pesar incluso de que terminen fastidiando la vida a todos aquellos que están a su alrededor. De ahí que me haya gustado muchísimo esa total de impunidad para con ellos. Maravilloso por tanto, don Pedro como villano.

Este es un tipo de amor tóxico y malsano, pero no es el único tipo de amor presente en la novela.

Y me gusta leer de cuando en cuando novela histórica porque, así el lector se da cuenta de que, pequeños detalles que nos definen como sociedad de tan habituales como son, hasta no hace mucho tiempo no eran así. Como es el hecho del matrimonio por amor. Especialmente en clases sociales privilegiadas - aunque en este sentido no lo eran tanto - donde esto, más que matrimonio era literalmente una unión entre familias para aumentar el patrimonio y la riqueza de cada una de ellas. Además de que, existía la idea de la pureza dela "sangre azul" que impedía que se interrelacionaras con personas que no fueran iguales a ellos: se ensuciaría esa limpieza, por supuesto.

Por eso, como el objetivo era el de perpetuar la sangre y la continuidad de la línea dinástica, la edad en dichos matrimonios solía ser bastante dispar y las mujeres solían ser mucho más jóvenes. Más posibilidades y más años para traer herederos.
Eso sí, no quiero decir que, una vez casados, no surgiera el amor o al menos, el entendimiento entre los miembros de dicha pareja.

Afortunadamente, esto ya no suele ser habitual y el motivo principal para contraer matrimonio es el del amor entre los miembros de la pareja. Si bien es cierto que este otro tipo de matrimonios también suelen suceder. Eso sí, están mejor camuflados.

Un segundo tipo de amor, perpetuado a lo largo del tiempo es el del maravilloso vínculo entre madres e hijas. No existe un amor y un vínculo más especial, amén de que refuerza a la perfección la idea de que un padre está dispuesto a hacer de todo por la felicidad de su hijo. Y este tipo de amor cobra aún más importancia con la profesión de partera de Manuela y María en el siglo XVI y también de Ana en el 2019.

Y este amor está íntimamente relacionado con otro mensaje que subyace entre las páginas de la novela porque, con tal de conseguir la felicidad de quienes están a nuestro alrededor, seremos capaces de hacer todo y de todo. Incluso ir y recurrir a la justicia, aunque nos tilden y tachen de locos por el poder y riqueza de nuestro contrincante.
Me ha gustado también por tanto ese mensaje esperanzador acerca de la potencia de este poder, ya que la sombra de la corrupción y por tanto, el descontento en general acerca del mismo suele ser más la tónica general.

No puedo no hacer mención a otro amor presente en esta novela, esta vez cosecha de la autora. El del amor por las palabras. Original ha sido en este caso además la inclusión y el tratamiento de la metaliteratura. Todo tiene su sentido y su por qué. Y hasta aquí puedo leer en ese sentido a riesgo de spoilers.

Si tuviera que ponerle un pero a esta novela es el final de la parte contemporánea, en el que todo ha sucedido demasiado precipitado y del que me hubiera gustado saber más acerca de lo que pensaban todas y cada una de las partes implicadas e importantes en él. Ya que, soy de la creencia de que, para formarnos una opinión de cualquier hecho acaecido, debemos conocer todos y cada uno de los detalles y aspectos de la misma.

Salvando ese detalle, he de decir que el ritmo narrativo de la novela es trepidante, sobre todo el de la parte histórica y que, si os atrevéis a conocer esta pedazo historia, no vais a parar hasta que la terminéis. Doy fe porque eso es lo que me sucedió a mí.

¡Muchas gracias por querer colaborar conmigo!

¡Perdón por la tardanza en la publicación!

¡Nos leemos pronto!



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