Miedo a enamorarme (bilogía miedo I) de Mónica de la Torre

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedicada a la opinión de uno de los libros viajeros que llegaron a mi 
casa en estos días. En este caso, además, me llegó la bilogía a la vez, así que por eso, dedicaré dos opiniones distintas a ambos libros. No conocía la pluma de la autora, aunque no era desconocida para mí, sí que le había dado publicidad y promoción en mi perfil para el Premio Literario de Amazon.

Y ahí se gestó y generó el poso de curiosidad por estos libros. Por eso, en cuanto vi que se echaban a volar... no me lo planteé. Por eso, no me voy a entretener mucho más en la parte introductoria de esta publicación y os dejo con la sinopsis y mi opinión de Miedo a enamorarme, primera parte de la bilogía Miedo de Mónica de la Torre:

SINOPSIS

Cuando un nuevo vecino se muda al piso de arriba, Ivy pierde su tranquilidad y estabilidad, pero al mismo tiempo empieza a experimentar una serie de sentimientos hacia ese chico que no había sentido nunca con Thomas, su novio de toda la vida.
Tyler, fotógrafo de profesión, es un chico alocado al que le gusta vivir el presente sin pensar en nada más, hasta que conoce a Ivy y su vida dará un giro de 360 grados.
El miedo al amor siempre lo complica todo entre dos personas, aunque quizás sea el odio que sienten el uno hacia el otro. ¿Puede ese odio transformarse en amor? ¿O quizás ese odio nunca existió?


OPINIÓN

En esta historia conoceremos la historia de Ivy y Tyler, cómo se conocen y cómo se enamoran. Demostrando en ese proceso que, las apariencias engañan y que, aunque a veces, debemos fiarnos de nuestra intuición y de nuestras primeras impresiones, estas a veces son erróneas y que por eso, es tan importante conceder segundas oportunidades. Incluso aunque sean como Tyler, porque al principio no hacía méritos para ser bien considerado.

Ambos nos narran sus vidas desde su propio punto de vista, lo cual permite que los conozcamos mucho mejor y podamos empatizar con ellos. Si bien es cierto que, en mi caso, no he conseguido empatizar del todo con Tyler. Y ambos también son muy diferentes entre sí.

Demostrando así esa creencia popular de que, los polos opuestos se atraen y que también debemos rodearnos de personas lo más diferente posibles a nosotros porque la diferencia enriquece y nunca separa. Junto a ello también, la autora explora de un modo bastante bien realizado el cambio de enemies to lovers a friends to lovers, demostrando así que las mejores relaciones de pareja son aquellas en las que los miembros de la misma, además de ser amigos, ellos también son amantes.
Aunque, ese es precisamente uno de los temas comunes que más se repiten en las páginas de la novela el miedo al amor. Explicado muy bien en este sentido porque, si esa relación amorosa sale mal, no solo se pierde a un amigo, sino también a un amante. Y por tanto, nos quedamos solos.

Junto a ello, la autora también representa al miedo al amor desde dos puntos de vista muy bien definidos por los protagonistas: ella es mucho más clásica y mantiene una relación de más de diez años con su pareja.

Y con estas circunstancias la autora recuerda que el amor se ha cuidar y cultivar en el día a día y que no hay que darlas por descontado ya que, se tiende al acomodo. Con el peligro que eso supone y que es precisamente lo que a ella le sucede. Además de eso, otro peligro bastante común con el acomodo es que se tiende a entender como una falta de interés. Y por eso, en no pocas ocasiones, es la antesala de una infidelidad.

En el otro extremo del sentimiento encontramos a Tyler, quien tuvo una relación tóxica con Amanda y que, a consecuencia de esto, quedó tan escaldado que prefiere no volver a involucrarse sentimentalmente con ninguna otra mujer, prefiriendo el sexo en su lugar.
Comportamiento muy común por otra parte, ya que, el sexo no va asociado al establecimiento de ningún vínculo para con el otro y, si bien puede ser más intenso que el amor, es más breve y por tanto, más inofensivo.

Sin embargo, ambos son más similares de lo que parecen a priori. además de lo del miedo, porque, con sus circunstancias se demuestra que todas las relaciones sentimentales de nuestras vidas tienen un profundo impacto en ellas. Incluso en algunos casos tan fuerte, que nos sirven de vara medir y punto de referencia para con las posteriores, lo cual es un error tremendo porque el amor pertenece al campo de la psique y como tal, evoluciona con las personas.

De ahí que por eso, se nos recuerde cuán importante es la práctica de la empatía bien realizada porque todos cargamos con unos demonios que no solemos compartir con los demás. Unos demonios que, en la inmensa mayoría de los casos explican perfectamente por qué actúan y se comportan como lo hacen.

Eso sí, tengo que decir que Tyler tiene un problema con el sexo fruto de una baja autoestima y una muy baja consideración y opinión de sí mismo. Por eso, por mucho que haya intentado hacer intentar ver al lector los motivos por los que actúa como lo hace, a mí personalmente se me han quedado escasos e insuficientes.

Otros mensajes importantes con respecto al amor incluidos en la novela y que merecen ser analizado son el hecho de que no podemos obligar a una persona a que nos quiera como nosotros lo hacemos o queramos que lo hagan. De nuevo, se tendería a la generalización y cada persona lo vive y entiende de un modo diferente a otra.

Y sobre todo, que no podemos utilizar a otras personas para provocar celos y/o llamar la atención de la persona de la que sí que estamos interesados. No solo porque eso no es amor, sino porque también, a la larga, provocaremos el sufrimiento del otro. Si bien es cierto que, por eso, es una historia muy real ya que tiende a ser el modo de actuar común.

El último aspecto del que quiero hablar con respecto al amor tiene que ver en este caso con el amor propio, el cual creo que, es el gran olvidado de esta novela. De nuevo, otorgándole así mucha veracidad y verosimilitud a los personajes principales.
En mi opinión, ambos necesitan estar tiempo solos y aprender así a quererse y a valorarse como deben. Porque solo así, una vez aprendemos a querernos bien podremos y sabremos querer bien a los demás.

Y no puedo no concluir este post sin hacer una mención a un aspecto que es fundamental, no solo en las relaciones de pareja, sino en todas y cada una de las relaciones importantes de nuestras vidas: como es el de la comunicación. Porque, de nuevo, si esta no se realiza de un modo correcto, más que ser un argumento a favor, se convierte en un obstáculo. E incluso en el detonante que puede poner punto y final a la misma.

Porque las palabras son mucho más fuertes e importantes de lo que nos han hecho creer siempre, tanto para bien como para mal. 

Dejo esbozado aquí este tema de la comunicación porque el final es abierto.

Y a vosotros os dejo también aquí porque... muy pronto os traeré la opinión dela segunda parte.

¡Nos leemos pronto!



Eso sí, tengo que decir que este chico tiene un problema y que 

A priori diferentes, pero en realidad son bastante más similare

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