Diez citas falsas para volver a enamorarse de Olga Salar

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy está dedicada a la opinión de uno de los libros viajeros que han llegado a mi 
casa en días pasados. No es de extrañar este encabezamiento, porque, como ya avisé, se me han juntado varios en casa, así que, de nuevo repito que esta frase quizás os resulte similar en futuras publicaciones del blog.

Pero, no me voy a entretener mucho más en la parte introductoria de esta entrada y por eso, prefiero dejaros con la sinopsis y mi opinión de Diez citas falsas para volver a enamorarse de Olga Salar:

SINOPSIS

¿Qué debe hacer una autora ante un bloqueo que se alarga en el tiempo? Desconectar ya no funciona y la fecha de entrega se acerca peligrosamente.
¿Su única opción? Recurrir a su mejor amigo quien no solo es un experto en las relaciones sin compromiso, sino que, además, es el amor platónico más intenso que Olivia ha sufrido en toda su vida.
¿El proceso? Diez citas falsas con Ford que terminan pareciéndose mucho a una relación romántica.
¿El resultado? Para eso tendrás que leer la novela.


OPINIÓN

Antes de comenzar con la opinión propiamente dicha, he de decir los motivos por los cuales me decidí a apuntarme a este viaje: principalmente se debe a que no conocía la pluma de la autora, si bien es cierto que la conocía de haberle dado promoción y publicidad en mi perfil.
Además, en este caso, tras haber leído la sinopsis, me la imaginé como una novela idónea para ser adaptada como película, así que... cuando vi que lo ofrecía para viajar, no me lo pensé y me apunté.

El cliché que se desarrolla en esta novela es, sin lugar a dudas, el del friends to lovers porque, Olivia y Ford, si por algo se caracterizan es porque son los mejores amigos el uno del otro. Y eso también le sirve a la autora para desarrollar dos idea. Muy acertadas en mi opinión.

La primera es que las mejores relaciones sentimentales son aquellas en las que los miembros de la pareja, además de ser amigos, también son amantes y también, creo que refleja muy bien el miedo tan presente en este tipo de parejas a que todo no termine lo bien que debería y por tanto, la pérdida sería doble puesto que no se pierde al amante, sino también, al amigo.

Sin embargo, también refleja de manera muy coherente cómo, a veces, ese miedo a no arriesgarnos y a preferir estar en la zona de confort la que nos impide vivir con total plenitud y más que vivir, sobrevivimos. Dos verbos que suelen ser confundidos y usados como sinónimos, cuando la realidad es que para nada se parecen.

Hay un homenaje muy bonito a la literatura,- - me encantó el nombre del gato - y muy especialmente a la literatura romántica, la cual, en no pocas ocasiones, es considerado un género menor y denostado en la comparación con otros. Olvidando, una vez más, que las comparaciones son odiosas y, al mismo tiempo, que la diferencia enriquece y no separa. Y un escritor, independientemente del género al que decida dedicar sus novelas, no es menos que otro. Del mismo modo que un género ni es más difícil ni es menor que otro.

De ahí que, este metareferencia está muy bien traída y además, convierte a la literatura en algo que va mucho más allá de un mero entretenimiento. La transforma en un arma de denuncia de algunos de los aspectos y temas de nuestra sociedad que merecen ser revisados y cambiados. Por eso, brava.

Y en este sentido, he de decir también que me ha gustado que sea él quien también tenga una relación directa y "de poder" dentro de la novela romántica ya que, buena parte de las críticas y opiniones negativas para con el género provienen precisamente del sexo masculino. El cual, en no pocas ocasiones, ni siquiera se ha leído una novela romántica en la vida.

En este sentido, me ha parecido muy inteligente la metáfora del género con la situación de los protagonistas Olivia y Ford. Enviando en ambos casos el mismo mensaje: en ocasiones, conviene salir de la zona de confort porque, quien no arriesga no gana y es mucho mejor ser valiente y arrepentirse de haberlo hecho a quedarse con una duda continua.

He entrevistado a muchos escritores y una respuesta que se suele repetir es que ellos toman como inspiración la vida cotidiana. Y por eso, me ha gustado que describa tan bien lo mal que se pasa cuando no hay inspiración o lo que nos rodea no nos inspira lo suficiente como para prender la mecha del inicio de la historia. De nuevo, es un aspecto que vuelve a dar el lugar que merece a profesiones de letras y cuya herramienta son las palabras.
Eso sí, también recuerda de un modo muy acertado que, al pertenecer al mundo de la psique, no se pueden estandarizar los tiempo y tampoco conviene meter prisa a la hora de crear nada. Porque, aunque parezca mentira, la prisa, la presión y la falta de disfrute se notan.

Otro aspecto que también se desarrolla muy bien en la novela es el de que tenemos que hacer caso de las señales porque el amor aparece dónde y cuándo menos se le espera y en no pocas ocasiones, está mucho más cerca de lo que hemos imaginado. Pero, como no hay más ciego que quien no quiere ver, somos nosotros mismos los que nos tiramos piedras a nuestro propio tejado.

Pero, de nuevo, tampoco hay que forzar nada ni a nadie porque, en muchas ocasiones, las buenas intenciones a la larga pueden cansar mucho daño. Y por eso, he de confesar que la amiga en ocasiones me resultó cansina ante la idea de que sí o sí tenía que conocer a su primo. Aunque, precisamente eso que más criticamos es algo que nosotros mismos también solemos hacer. Así que ese consejos vendo que para mí no tengo es muy real y provoca que los lectores se sientan identificados con los personajes.

Es cierto que buena parte de las parejas se forman a través de conocidos comunes, pero no hay que presionar porque si no, esa buena disposición inicial, puede transformarse en rechazo rotundo y lo que es peor, a la larga se pierde la oportunidad, no solo de conocer a alguien muy interesante, que también, sino también a una posible pareja.

Uno de los aspectos que más me han gustado de la novela es la rotundidad y la gran importancia de la sororidad, ejemplificada de manera magnífica en el buen rollo y la amistad entre el grupo de escritoras. Demostrando así que, si hay interés, no hay obstáculos en el buen desarrollo de una relación, ni tan siquiera por estar separadas por muchos kilómetros y sobre todo, que si las mujeres nos apoyáramos más entre nosotras en lugar de criticarnos, las cosas serían muy diferentes y nos iría mucho mejor a todas.

Aparte de la metaliteratura, es un homenaje a las historias de amor. Así que, le gustará a cualquier amante del género. Amén de que juega muy bien con la idea de que toda mentira tiene su parte de verdad y por eso, la comodidad y la falta de competencia real era lo que los mantenía en ese estatus eterno de friend zone. De ahí que se valgan de esas citas falsas para dar rienda suelta a sus yoes verdaderos.

Está muy bien desarrollada por tanto, esa idea de que nunca te acostarás sin saber algo más. Y sobre todo, advierte que, por muy bien que creamos conocer a una persona, siempre podrá sorprendernos. De ahí que no haya que dar nunca nada por descontado. Ni a nadie.

Y, aunque en ocasiones puede parecer una novela predecible, para nada lo es porque, me ha gustado mucho la inversión de roles y que de los dos, sea él quien se sienta de menos ya que esto no suele ser lo habitual. Menos cuando, aparentemente, es un triunfador en la vida. Y por eso, se nos recuerda muy bien que debemos ser más empáticos porque las apariencias engañan y todos cargamos con unos demonios que no compartimos con los demás. Bien porque nos da vergüenza, bien por miedo a la exposición, al juicio y a la pérdida posterior.

La dinámica entre los dos es estupenda desde el minuto uno, y es más, también me ha gustado que recuerde que el modo en que cada uno de nosotros vivimos una relación y la sexualidad dentro de ellas es personal. E incluso, como suele decirse en coletilla, intransferible. De ahí que no hay que generalizar ni estandarizar absolutamente nada.

Eso sí, al respecto de la trama amorosa diré que este es el aspecto más flojo de la novela porque, se me ha quedado a medias. Entiendo los motivos por los cuales la autora ha decidido cortarlo ahí, pero, en mi opinión, dado el punto en el que se encuentran en la historia, creo que Olivia se hubiera merecido un cortejo total.

Salvando ese detalle, es una novela que se lee bastante rápido y que os sacará más de una sonrisa.

El libro ya ha salido hacia la siguiente parada. 

¡Nos leemos pronto!

Comentarios

  1. Muchísimas gracias por tu reseña, Laura.
    Un abrazo enorme.

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