Entrevista a... Isabella Marín
¡Buenas tardes!
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1. ¿Desde cuándo escribes?
Empecé hace diez años. Antes había tanteado la idea, pero me hacía falta disciplina para implicarme en un proyecto tan grande. No tengo mucho aguante para la frustración, y sospechaba que este iba a ser un trabajo gratificante, aunque también frustrante.
Y acabó siéndolo.
2. ¿Tienes alguna manía a la hora de escribir?
No, qué va. Soy un ser humano tranquilo y sin manías. Solo quiero que se vaya todo el mundo a tomar por saco para que pueda trabajar a gusto en PROFUNDO Y ABSOLUTO SILENCIO. Tampoco es tanto pedir.
3. ¿Cuántas horas escribes al día?
Depende del día y de lo bien (o lo mal) que se me dé. Mínimo, 4 horas diarias. A veces, 8. Si estoy inspirada, 10 o 12 horas. No vivo en esos momentos, pero soy feliz.
Aunque últimamente solo tengo un par de días buenos al mes. El resto es disciplina, obligarse a soltar el mando a distancia, cosa que nunca quiero hacer, claro.
4. ¿Cuánto tiempo tardas en terminar una novela?
Alrededor de 3, 4 meses. 2 si estoy verdaderamente inspirada (muchos días de 10, 12 horas) y si es un libro fácil (chick lit de los que fluyen)
5. ¿Existe algún género que te negarías a escribir?
Probablemente, ciencia ficción. Me aburriría a mí misma.
Aunque, como anécdota, deberíais saber que lo primero que escribí fue una historia de amor que se desarrollaba en una nave espacial. Yo tenía nueve años y todos los personajes morían en el acto final. Siempre he sido algo siniestra...
6. ¿De dónde tomas la inspiración para tus novelas?
De cualquier parte. Mi cerebro es un pozo sin fondo que lleva treinta y tantos años almacenando datos. Ahí hay mucho material surrealista.
7. ¿Cuál de tus personajes femeninos se parece más a ti? ¿Y masculino?
Todos tienen algo mío, los chicos y las chicas. Pero, sobre todo, los chicos. Yo tengo un lado masculino muy desarrollado. Me críe con chicos y creo que hasta los 15 no emprendí que yo no era uno de ellos. Más o menos hasta que ellos empezaron a mirarme raro, yo era un tío más de la pandilla. Luego empecé a usar sujetador.
8. ¿Cuántos libros has escrito? ¿Dónde se pueden comprar?
Más de 30. Están todos en Amazon.
9. ¿Por qué deberían leer tus libros?
Cuando escribo, lo hago para mí, porque yo soy mi crítico más quisquilloso y lo primero que pienso es: esto tiene que gustarme porque, si no, me aburro, me flaquea la disciplina y se va todo al pique.
Así que, si hay por aquí alguien que valore el sentido del humor ácido e irónico, que tenga debilidad por los personajes complejos, que casi siempre oscilan entre las luces y las sombras, más villanos que héroes, o (si elegís una de las chick-lit), las protas sin filtro que nunca hacen lo que tú harías (ahí está la gracia), que les eche un vistazo. Tal vez le sorprendan. Para bien o para mal...
10. ¿Tienes algún proyecto en mente?
Sí, estoy metida de lleno en la segunda parte de El aire que me quitas.
11. ¿Algún consejo, recomendación a una persona que desee autopublicar?
Que se lo tome en serio, como lo harías con cualquier otro trabajo. Hay que invertir tiempo y dinero, estar preparado tanto para el éxito como para el fracaso. Una vez aceptes que se acabó lo de tener vida personal, fines de semana libres, vacaciones... Que vas a vivir eternamente esclavizado por personajes despóticos que te susurran gilipolleces al oído... Una vez aceptes todo eso, es pan comido. En serio.
Cuando Alexandra irrumpe en la oficina de Ash en busca de una oportunidad laboral en una ciudad en la que no conoce a casi nadie, tiene claro que él no es ni de lejos el hombre que pintan los periódicos.
Portada de la revista Forbes, apodado el magnate del ocio, CEO del Grupo Williams, una de las empresas más solventes de Cleveland…
Todo respetable y muy legal.
Pero a ella le parece que lleva como una especie de disfraz que no le pega en absoluto.
Y está muy empeñada en descubrir qué es lo que se oculta tras la máscara de ese hombre que desprende tanta energía que perturba la atmósfera de cualquier lugar y, sobre todo, la perturba a ella.
―Usted es… difícil de interpretar. Mirarle es como contemplar un enorme mosaico romano en el que algo no encaja. A primera vista parece todo correcto, colocado en el lugar que corresponde, pero hay una nota discordante que rompe por completo la armonía del conjunto.
―Ha conseguido intrigarme, señorita Harper, y no hay mucha gente que pueda presumir de eso últimamente. ¿Cuál es esa nota discordante que ve en mí?
―Hay varias, en realidad. Pequeños detalles. Los tatuajes que tiene en los dedos y en las manos no encajan para nada con la elegancia de su ropa, y su pose despreocupada contradice por completo lo inteligente y observadora que es su mirada cuando te fijas en ella de verdad. Tengo la impresión de que lleva como una especie de disfraz y, cuanto más le analizo, más claro tengo que no le pega en absoluto. Así que no puedo dejar de preguntarme... ¿A quién pretende engañar? ¿A los demás? ¿O a sí mismo?
La entrada del blog de hoy se corresponde con una de las dinámicas que organizo tanto en el blog como en el feed. Efectivamente, se trata de las entrevistas que realizo a autores y autoras que han colaborado conmigo o que han participado en las dinámicas de amigos invisibles que organizo.
En este caso, pertenece al primer grupo. Y por eso, no me voy a entretener mucho más en la parte introductoria de esta publicación y prefiero que conozcamos a Isabella Marín, tanto desde el punto de vista personal como profesional.
Así pues, ¿quién es Isabella?
BIOGRAFÍA
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Isabella Marín (1987), es licenciada en Periodismo y Filosofía, y autora de más de treinta novelas.
Tiene debilidad por los personajes complejos y atormentados que oscilan entre las luces y las sombras, más villanos que héroes, aunque le gusta experimentar y no encasillarse en un único subgénero ni trabajar siempre con el mismo tipo de personaje.
Tiene debilidad por los personajes complejos y atormentados que oscilan entre las luces y las sombras, más villanos que héroes, aunque le gusta experimentar y no encasillarse en un único subgénero ni trabajar siempre con el mismo tipo de personaje.
Una vez la hemos conocido desde el punto de vista personal, ahora toca el turno del profesional mediante las respuestas a las preguntas que le formulé en la entrevista.
¿Preparados?
1. ¿Desde cuándo escribes?
Empecé hace diez años. Antes había tanteado la idea, pero me hacía falta disciplina para implicarme en un proyecto tan grande. No tengo mucho aguante para la frustración, y sospechaba que este iba a ser un trabajo gratificante, aunque también frustrante.
Y acabó siéndolo.
2. ¿Tienes alguna manía a la hora de escribir?
No, qué va. Soy un ser humano tranquilo y sin manías. Solo quiero que se vaya todo el mundo a tomar por saco para que pueda trabajar a gusto en PROFUNDO Y ABSOLUTO SILENCIO. Tampoco es tanto pedir.
3. ¿Cuántas horas escribes al día?
Depende del día y de lo bien (o lo mal) que se me dé. Mínimo, 4 horas diarias. A veces, 8. Si estoy inspirada, 10 o 12 horas. No vivo en esos momentos, pero soy feliz.
Aunque últimamente solo tengo un par de días buenos al mes. El resto es disciplina, obligarse a soltar el mando a distancia, cosa que nunca quiero hacer, claro.
4. ¿Cuánto tiempo tardas en terminar una novela?
Alrededor de 3, 4 meses. 2 si estoy verdaderamente inspirada (muchos días de 10, 12 horas) y si es un libro fácil (chick lit de los que fluyen)
5. ¿Existe algún género que te negarías a escribir?
Probablemente, ciencia ficción. Me aburriría a mí misma.
Aunque, como anécdota, deberíais saber que lo primero que escribí fue una historia de amor que se desarrollaba en una nave espacial. Yo tenía nueve años y todos los personajes morían en el acto final. Siempre he sido algo siniestra...
6. ¿De dónde tomas la inspiración para tus novelas?
De cualquier parte. Mi cerebro es un pozo sin fondo que lleva treinta y tantos años almacenando datos. Ahí hay mucho material surrealista.
7. ¿Cuál de tus personajes femeninos se parece más a ti? ¿Y masculino?
Todos tienen algo mío, los chicos y las chicas. Pero, sobre todo, los chicos. Yo tengo un lado masculino muy desarrollado. Me críe con chicos y creo que hasta los 15 no emprendí que yo no era uno de ellos. Más o menos hasta que ellos empezaron a mirarme raro, yo era un tío más de la pandilla. Luego empecé a usar sujetador.
8. ¿Cuántos libros has escrito? ¿Dónde se pueden comprar?
Más de 30. Están todos en Amazon.
9. ¿Por qué deberían leer tus libros?
Cuando escribo, lo hago para mí, porque yo soy mi crítico más quisquilloso y lo primero que pienso es: esto tiene que gustarme porque, si no, me aburro, me flaquea la disciplina y se va todo al pique.
Así que, si hay por aquí alguien que valore el sentido del humor ácido e irónico, que tenga debilidad por los personajes complejos, que casi siempre oscilan entre las luces y las sombras, más villanos que héroes, o (si elegís una de las chick-lit), las protas sin filtro que nunca hacen lo que tú harías (ahí está la gracia), que les eche un vistazo. Tal vez le sorprendan. Para bien o para mal...
10. ¿Tienes algún proyecto en mente?
Sí, estoy metida de lleno en la segunda parte de El aire que me quitas.
11. ¿Algún consejo, recomendación a una persona que desee autopublicar?
Que se lo tome en serio, como lo harías con cualquier otro trabajo. Hay que invertir tiempo y dinero, estar preparado tanto para el éxito como para el fracaso. Una vez aceptes que se acabó lo de tener vida personal, fines de semana libres, vacaciones... Que vas a vivir eternamente esclavizado por personajes despóticos que te susurran gilipolleces al oído... Una vez aceptes todo eso, es pan comido. En serio.
Ya la hemos conocido desde ambos puntos de vista, pero, esta también es una publicación para dar promoción y publicidad, así que os voy a dejar aquí su perfil en las RRSS:
- Facebook: AQUÍ
- Instagram: AQUÍ
Además, si habéis prestado atención, sus novelas están todas disponibles en Amazon, así que os dejo aquí su página de autor en la plataforma. AQUÍ.
Y para concluir, os dejo aquí la promoción y publicación de la última novela que ha escrito, la cual voy va a ser mi próxima lectura en digital: El aire que me quitas.
SINOPSIS
Portada de la revista Forbes, apodado el magnate del ocio, CEO del Grupo Williams, una de las empresas más solventes de Cleveland…
Todo respetable y muy legal.
Pero a ella le parece que lleva como una especie de disfraz que no le pega en absoluto.
Y está muy empeñada en descubrir qué es lo que se oculta tras la máscara de ese hombre que desprende tanta energía que perturba la atmósfera de cualquier lugar y, sobre todo, la perturba a ella.
―Usted es… difícil de interpretar. Mirarle es como contemplar un enorme mosaico romano en el que algo no encaja. A primera vista parece todo correcto, colocado en el lugar que corresponde, pero hay una nota discordante que rompe por completo la armonía del conjunto.
―Ha conseguido intrigarme, señorita Harper, y no hay mucha gente que pueda presumir de eso últimamente. ¿Cuál es esa nota discordante que ve en mí?
―Hay varias, en realidad. Pequeños detalles. Los tatuajes que tiene en los dedos y en las manos no encajan para nada con la elegancia de su ropa, y su pose despreocupada contradice por completo lo inteligente y observadora que es su mirada cuando te fijas en ella de verdad. Tengo la impresión de que lleva como una especie de disfraz y, cuanto más le analizo, más claro tengo que no le pega en absoluto. Así que no puedo dejar de preguntarme... ¿A quién pretende engañar? ¿A los demás? ¿O a sí mismo?
¿Qué os parece? ¿Os llama la atención? Pues ya la tenéis disponible en la plataforma.
¡Muchas gracias por tu tiempo y por tus respuestas a la entrevista!
Aunque, sobre todo, ¡muchas gracias por querer colaborar conmigo!
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