El hombre de Niebla: el caso Barlock de Kress Watson

¡Buenas tardes!

La entrada del blog de hoy se corresponde con la opinión de uno de los libros viajeros que llegaron a 

mi  casa en días pasados. Por sorprendente que parezca, sigo apuntada a estas dinámicas, así que, en más de una ocasión, vais a ver este mismo encabezamiento por aquí. Más pronto que tarde además.

En este caso en concreto además, sí que conozco la pluma de la autora, pero la había leído en un género completamente diferente a este. Por eso, además de que soy guía de misterios y leyendas en mi ciudad, en cuanto vi que echaba a volar esta historia... no pude evitar no apuntarme.

Así que, aquí estamos y ese es el motivo por el cual no me voy a entretener mucho más en la parte introductoria de la novela porque, en cambio os voy a dejar con la sinopsis y mi opinión de El hombre de Niebla: el caso Barlock, escrito por Kress Watson:

SINOPSIS

UNA CRIATURA QUE HABITA EN LA OSCURIDAD. UNA MISIÓN CONTRARRELOJ.UNA LEYENDA QUE SE VUELVE REAL POR MOMENTOS.

Hay algo atemorizando a los humanos desde hace años. Una leyenda, según cuentan. Una sombra que hace desaparecer a las personas sin dejar rastro. Pero el Hombre de Niebla dejará de ser solo un rumor cuando Kevin, un joven agente de policía que está investigando dichas desapariciones, reciba un misterioso mensaje: La cuenta atrás ha comenzado. 

Está aquí.

Allí.

Está en todas partes.

OPINIÓN

Antes de comenzar con la opinión propiamente dicha, en cambio, lo que voy a hacer es un par de comentarios al respecto de la portada y de la novela en sí.

En primer lugar, la portada me llama muchísimo la atención. Y el hombre que aparece ahí representado se da un cierto toque inquietante a Van Helsing que está muy chulo. A mí, personalmente, la película me pareció bastante entretenida en su momento.

Y en cuanto a la historia en sí, he de decir que es el primero de una saga y que, pese a que algunas partes han quedado cerradas en este volumen, la realidad es que hay tramas que no. Así que si eres un lector con ansia voraz lectora... tendrás que esperar para saber más.

En esta novela se juega muy bien con el tema de las creencias, las supersticiones y el miedo. Que son comunes y colectivos, pero también individuales. Por eso, no conviene burlarse o menospreciar los de los demás y sí practicar más y mejor la empatía, que suele brillar por su ausencia en nuestra sociedad.

En este sentido, tengo que decir que me ha gustado mucho el hecho de que haya decidido ubicar y ambientar la acción de esta novela en España. Sorprendente por lo poco común, porque yo misma pensé que se ambientaría en Norteamérica. Así que esa pullita y palito de realidad necesaria, ha sido además bienvenida. Más que nada porque nuestra propia tradición y folclore es bastante rico y no tiene por qué desmerecerse con otros de otros lugares del mundo.

Las comparaciones son odiosas y además, la diferencia enriquece y no tiene por qué separar.

Hablando de esto además, tengo que decir que siempre he pensado que la niebla puede provocar fascinación, pero terror al mismo tiempo. Porque no nos deja ver lo que hay a nuestro alrededor y además, tampoco seremos quienes manejan la situación. Por eso, su peligrosidad, pero también el interés.

Y esto creo que es una metáfora muy interesante del ser humano y su dualidad. Tal y como queda bien reflejado en los personajes de esta novela.

Una dualidad que también se repite con el tema de las creencias, supersticiones y leyendas, porque todas tienen su base de realidad y su parte de ficción. Pero que está en nosotros el ser capaces de distinguir la una de la otra. En ocasiones, siendo más difíciles que en otras.

Sin duda, el protagonista de esta historia es Kevin, un joven policía novato al que no toman en serio casi que en ningún aspecto de su vida, lo cual es bastante injusto.

En el trabajo, es siempre el último mono y del cual se aprovechan. Y es muy fácil sentirse identificado con él, ya que, recién llegado, tenemos todo el entusiasmo y energía del mundo y queremos ser parte del lugar. Y eso provoca que, en muchos casos, se aprovechen de nosotros bajo la excusa y el amparo de nuestra juventud.

Porque asocian juventud con inexperiencia, olvidando que, todo el mundo tiene unos inicios y que nadie nace sabiendo. Así que, debemos respetar a todos nuestros compañeros, como parte del grupo que son y sobre todo, darles la validez que merecen; toda. Ya que por algo habrán obtenido ese puesto de trabajo. Y sobre todo, que el tiempo pone a cada uno en su lugar... así que, a la larga la cara de cada uno terminará por revelarse.

En no pocos casos, como bien se extrae aquí, ese menosprecio y burla está camuflado de miedo al darse cuenta y sentirse superados por las nuevas generaciones. O mejor dicho, en alguno de los nuevos campos y ámbitos de la sociedad contemporánea para los que ellos aún no se han actualizado o puesto al día del todo. Demostrando así, que, la exposición y el reconocimiento público de lo que sentimos sigue dándonos miedo y preferimos ocultar nuestros propios sentimientos, antes de admitir o asumir lo que verdaderamente nos pasa. Un modo de tratar y gestionar la masculinidad frágil de lo más interesante.

Es adoptado también y además, muy diferente físicamente al resto de sus familiares, lo cual evidencia de modo más claro esa "no pertenencia". Cuando es un error, todas las familias son exactamente igual de válidas y sobre todo, que el mero hecho de que se comparta un grupo sanguíneo o un vínculo con otra persona, no tiene por qué ser motivo o justificación para tratar mal o menospreciar a los demás.

Al contrario, hay que darle la consideración que merece y sobre todo, recordar que acciones y gestos pueden ser feos y por tanto, generar mucho daño. Así que, si no te sientes preparado para convertirte en padre, simplemente no te decidas a dar el paso. Es una responsabilidad muy grande, que no solo te afecta a ti, también a los demás. Porque padre se hace y no se nace.

Pero también hace alusión al amor sano entre los miembros de una familia, puesto que es lo que le sucede a su hermano, lo que le sirve de estímulo para dar ese paso adelante y aceptar su verdadero yo. Ya que sí, esta es también una novela en la que se narra el viaje de autodescubrimiento de nuestro protagonista. Con sus partes buenas y malas. Porque la oscuridad no tiene por qué ser su opuesta y por tanto, tampoco ser entendida como algo negativo.

La clave está en el respeto a los demás, como bien se incide aquí al incluir y mencionar tantas especies sobrenaturales entre sus páginas. Tolerancia y empatía una vez más, porque todo el mundo carga con unos demonios que no solemos compartir con los demás - aquí incluso de manera más literal - porque nos suele dar vergüenza o miedo hablar de ello.

Es también una novela feminista porque critica, una vez más cómo, la mujer suele ser siempre la víctima "predilecta" o "preferida" en situaciones de violencia. Y por eso, aún se nos considera como el sexo débil, cuando no es así. Más que nada porque hay que aceptar que la fuerza no va siempre asociada a un físico determinado, sino que la fortaleza mental es mucho más poderosa que la otra.

Eso sí, en este sentido, tengo que darle la enhorabuena a la autora, porque el modo en el que narraba el secuestro de las chicas y el resto de personas es genial.

No puedo no concluir esta opinión sin hacer mención a que esa novela me ha parecido sorprendente. En las revelaciones, y sobre todo, en el final. Porque no lo esperé.

Y también porque nos hace un recordatorio bastante brutal de la realidad: el mal está mucho más cerca de lo que podríamos pensar, acechándonos a diario. Más que nada porque está dentro de todos y cada uno de nosotros. Y que esa balanza puede inclinarse hacia uno u otro extremo ante el más mínimo estímulo.

Pero también está la fuerza, la magia y la unión. Como bien demuestra el número tres, sucesión y suma de tres veces el uno. Resaltando el poderío de la individualidad, pero que no puede actuar sola, que seremos más fuertes en la unión. De ahí que, me aventure a decir que van a ser tres los libros en los que Kevin va a tener protagonismo y que se exponga como cebo y como el héroe sombrío que en realidad es.

¿Habré acertado? Tendremos que esperar para saberlo.

Mientras tanto, tened cuidado con el hombre de Niebla...  

El libro se ha dirigido ya a la siguiente parada.

¡Nos leemos pronto!